Editorial Alaire

MMartinezGo escribió:Los años han pasado,
y a pesar del tiempo transcurrido,
aún se me erigen bajo la piel las efigies de los sueños
perdidos y los anhelos que cimentaron nuestro mundo.

El desierto no es más que la ausencia
de aquello que se añora, y su arena,
ha recubierto mi orgullo
con todas las sonrisas y miradas
que compartimos a medias,
hasta marmolear todos los segundos
en el mausoleo de mi existencia.

Este marasmo en el que vivo
ha cercenado los dinteles de mi espacio,
hasta convertirlo en un pretexto
con el que amortajar
la encarnadura de los sentimientos.

No hay espejismos en el horizonte,
ni oasis que ofrezcan una tregua, solo resabios
de nubes afligidas, escanciadas al sol del mediodía.

Y, aunque los días con las noches se confundan,
y en este erial que me conturba, venerando un vellocino
de piedra enjaulado, me consuma;
yo, no puedo olvidar…
aunque con ello,
me olvide de mi mismo.