Editorial Alaire

Mi velero de acero, los baños de dolor y fuego

mi corazón en primavera,

Y el mar, que en cada espuma, llena sentimiento,

resaca de amor y mil playas pintadas,

las huellas del alma, que en levedad son cariño,

el olor del humo, y el sabor del cielo.




Ese nido de cigüeñas, que el invierno pintó,

un paseo del frio, el sol, un calor en las manos,

el amor del silencio, acercando la luna al pasar,

la soledad, en beso que se va junto a ti,

y una canción que abraza mi alama y mi piel,

y la paz de un querer, que ilumina y te sueña.




Lo que del cielo cae lento y es que bien lo sabe Dios,

que en pasajes de mi vida te busque,

y este corazón a la deriva, que no te quiere perder

y las noches que mi alma te escribe,

y esas cajas que nos juntan ratitos,

esos besos que destapan mi corazón acelerado.



Mi cuerpo, que es mío, que ya no es de nadie,

ya solo vive, los acordes de tu canción,

duerme suspirando, entre las llamas de tus canas,

y las caricias revoltosas, que escombros roban.



En el cajón de las ganas, compartimos pecados,

mis anclajes solo sienten tus instintos,

el desliz del deseo entre tus manos,

y los túneles del fuego y mis dardos, y todo tan dentro

los sentidos que se apartan, los colores del universo,

y un tango que canta un solo cuerpo.

Curra

Me han gustado mucho esos versos, en los que, con preciosas pinceladas, vas pintando uno sentimientos de amor.

Buen poema

Felices fiestas

Alfonso Espinosa

un millón de gracias, de verdad que eres un tesoro

Un poema hermoso y lleno de sentimientos, amiga curra.
Un placer leerte.
Fuerte abrazo.

Volveré a él cuando me dejen leerlo en paz. Me ha gustado mucho lo leído.

Un abrazo.

un millón de gracias

muchas gracias miguel angel