El duende y su moscardón
Publicado: Jue, 13 Nov 2014 4:21
Montado sobre un moscardón vuela un duende diminuto,
se aferra a las alas transparentes y lanza un escupitajo
que cae en los arbustos del paisaje.
Zumba el díptero sobre un mar de flores coloridas,
se posa en la más bella y el duende penetra
los estambres en busca de licor.
Queda borrachito, llama a su moscardón, el eco estremece
la flor, se fue volando su cabalgadura y la noche vino
con su luna.
El duende se tambalea, sujeta los pistilos, sale de la flor
dando traspié, da un chiflido y cae desde una altura de tres pies.
Los astros tiritan en su mirada turbia, abre la boca y besa
a una libélula solitaria que trató de posarse en su mejilla.
Se levanta el muy borrachón y en el aire escucha
el zumbido de su moscardón, trepa gateando una espiga,
salta sobre el lomo oscuro y escapa hacia su reino desconocido.
se aferra a las alas transparentes y lanza un escupitajo
que cae en los arbustos del paisaje.
Zumba el díptero sobre un mar de flores coloridas,
se posa en la más bella y el duende penetra
los estambres en busca de licor.
Queda borrachito, llama a su moscardón, el eco estremece
la flor, se fue volando su cabalgadura y la noche vino
con su luna.
El duende se tambalea, sujeta los pistilos, sale de la flor
dando traspié, da un chiflido y cae desde una altura de tres pies.
Los astros tiritan en su mirada turbia, abre la boca y besa
a una libélula solitaria que trató de posarse en su mejilla.
Se levanta el muy borrachón y en el aire escucha
el zumbido de su moscardón, trepa gateando una espiga,
salta sobre el lomo oscuro y escapa hacia su reino desconocido.