Editorial Alaire

Carmín puesto en tus labios
para ornamentar la puerta a tus palabras,
palabras de duelos y consuelos
palabras evaporadas ante el viento.

Presencia lunar de la aurora
que precisan el clamor de tus horas.
En el tiempo acontecido
has dado fruto a lo vivido.

El oro de tu aura ha oscurecido
fingiendo que no encuentras el sino
que comprende las horas de tus días
haciéndote presa de tus guías.

Espíritu toscamente alterado,
espíritu habitualmente atormentado,
espíritu cimbreado y acribillado
aguarda en el pecho quebrado.


Solventando el anhelo de lo alado
clausuras en tu mente los recuerdos
recuerdos en nostalgias se transforman
a la espera de una perpetua mejora.

Si entiendes lo que digo es que lo sabes,
si sabes que lo entiendes lo comprendes
si no comprendes nada de lo dicho
negarás entonces ser este tu dicho.

Me ha gustad este verte en la nada, un poema imprevisible pero hermoso, donde resalto la penúltima estrofa. Un placer y un abrazo.

Gracias por tu respuesta, un placer Manuel Alonso. Imprevisible ¿en qué sentido? ¿por qué imprevisible? ¿Existen poemas previsibles? Me has dejado con una gran duda. Gracias.