LOCA
Publicado: Sab, 10 May 2008 20:28
Nunca amaste el pecado
o el concepto perverso
con el que lo designan
aquellos que pretenden
justificar sus actos o medirlos,
no guardaste las noches
para soñar instantes imposibles
en tu alcoba, no,
no miraste a otro lado
sino hacia todas partes
con una indiferencia
que te hacía atractiva
y seductora.
Por eso no buscaste
la redención que todos pretendieron
basándose en tu error,
quizás el que ellos mismos cometieron
juzgando
tu primordial encanto,
tu dejarte llevar,
tu alocada inconsciencia
de derivar la vida
sin pensarla.
Yo quise amar contigo,
escalar, como tú, cada mañana
con el descaro ingenuo
que afirmaban tus gestos,
quise robar tus horas,
jugar con la avidez
de una pasión febril y atormentada,
pero me fui sin ti
disipado en el siempre
de lo que no amanece
para hacernos saber que hemos vivido solos,
como sin darnos cuenta algunas veces.
J. Borao
o el concepto perverso
con el que lo designan
aquellos que pretenden
justificar sus actos o medirlos,
no guardaste las noches
para soñar instantes imposibles
en tu alcoba, no,
no miraste a otro lado
sino hacia todas partes
con una indiferencia
que te hacía atractiva
y seductora.
Por eso no buscaste
la redención que todos pretendieron
basándose en tu error,
quizás el que ellos mismos cometieron
juzgando
tu primordial encanto,
tu dejarte llevar,
tu alocada inconsciencia
de derivar la vida
sin pensarla.
Yo quise amar contigo,
escalar, como tú, cada mañana
con el descaro ingenuo
que afirmaban tus gestos,
quise robar tus horas,
jugar con la avidez
de una pasión febril y atormentada,
pero me fui sin ti
disipado en el siempre
de lo que no amanece
para hacernos saber que hemos vivido solos,
como sin darnos cuenta algunas veces.
J. Borao