Editorial Alaire

Manuel Sánchez escribió:Hay fechas en las que la inocencia dañada por el trueno
no soporta su origen melancólico
y envuelve con sus brazos los sueños más extraños.
Hasta que los tejados preguntan por la nieve
y una ilusión fugaz se descompone,
y ya no somos nombres
sino letras a solas sin palabras,
tiempos alrededor de las preguntas,
libertades que vagan
en la llanura de sus pensamientos.

Quién pudiera otorgar a las tormentas
esos lugares tristes de las meditaciones, y robarle a una nube
cualquier bella intención del universo.

Nadie debe morirse
de una falta de vida prolongada.
Ni escuchar confesiones dichas en un rincón,
a la espera de juicio.

Concha Vidal escribió:Manuel , un año de este inocente y bendito poema.
Lo retomo, vale la gloria releerlo.

Abrazos marinos.

Carmen López escribió:Pues yo que me alegro de las excavaciones de Concha, ya van dos poemas recuperados que se me habían perdido, ambos maravillosos.
Estoy de acuerdo con los compañeros, belleza y vida es lo que contiene tu brillante poesía, que dado los tiempos que corren, es una bendición para los que te leemos y no nos vamos a cansar jamás de hacerlo.

Un abrazo grande, grande, amigo mío.

Carmen

Manuel Sánchez escribió:
Hay fechas en las que la inocencia dañada por el trueno
no soporta su origen melancólico
y envuelve con sus brazos los sueños más extraños.
Hasta que los tejados preguntan por la nieve
y una ilusión fugaz se descompone,
y ya no somos nombres
sino letras a solas sin palabras,
tiempos alrededor de las preguntas,
libertades que vagan
en la llanura de sus pensamientos.

Quién pudiera otorgar a las tormentas
esos lugares tristes de las meditaciones, y robarle a una nube
cualquier bella intención del universo.

Nadie debe morirse
de una falta de vida prolongada.
Ni escuchar confesiones dichas en un rincón,
a la espera de juicio.