Editorial Alaire

Texturas
y sus manos descubren
la primavera que late
bajo la nieve

A. Spunberg

aún me dan curiosidad las texturas -
con un nombre que se muere en la mano arman su naufragio -
y las más de las veces un sonido anegado que es lento y sinuoso
consigue parecerse a un silencio impreciso - me propongo
ese filo para las certezas - defiendo gestos del color del plomo -
depende cuanto aire acierte a decir con los ojos cerrados -

un fervor interior crece a parecer – hasta ahí se conforman
las ignorancias, avanzan entre unos diluvios de manos cruzadas
sobre el pecho. Siempre son sonidos y un completo smog
que resuena - algunos naipes se puede predecir –

se marchitan de estos peces demorados – han triunfado,
hace rato comen tiempo sobre las escamas – su forma ojerosa
tierna permeable es un café que se recorre en barco alrededor
de una taza de rotunda pequeñez que ablanda tiempo –

sin confusiones ni cambios las manos sin señas como toca
un mago insistiendo sin prisa, hechas de sal duran.

aún animan las texturas, a veces las supongo pálidas,
después digo que la prisa es mirar su aspereza, un susurro
escarpado de ese color que asume el frío de algunos elementos
que han dejado de creer, grietas sin luz, malabares sin mañana,
un río en su apogeo reclamando la soledad hasta ser olvido, disueltos
sus pliegues, dormido en un regazo que es cálido y oscuro -

Tengo la impresion que este poema se eleva y se dora mientras uno está atento a los sabores misteriosos que llegan con la brisa,a lago, a peces lentos, asi veo yo tu poesia, siempre cumple las expectaciones, mi madre está alrededor mío, hay una mesa debajo de una cúpula de la que cuelgan pesadas uvas, yo leyéndote, pensado en las texturas, en esa parte del sueño, de tu sueño, que se me revela al leerte. Es un poema magistral, como muchos otros tuyos. Y se me llena el alma de alegria, sé que es un momento imperdible. recibe mis abrazos, querido amigo.

Macedonio Tracel escribió:Texturas
y sus manos descubren
la primavera que late
bajo la nieve
A. Spunberg

aún me dan curiosidad las texturas -
con un nombre que muere en la mano arman su naufragio -
la más de las veces un sonido anegado lento y sinuoso
consigue parecerse a un silencio impreciso - me propongo
ese filo para las certezas - defiendo gestos del color del plomo -
depende cuanto aire acierte con los ojos cerra dos -

un fervor interior crece a parecer – hasta ahí se conforman
las ignorancias, avanzan entre diluvios, las manos cruzadas
sobre el pecho. Siempre son sonidos, un completo smog
que resuena a naipes se puede predecir –

las texturas se marchitan de estos peces demorados – han
triunfado hace tiempo sobre las escamas – la forma ojerosa
tierna permeable de un café se recorre en barco alrededor
de la taza en su rotunda pequeñez que ablanda tiempo –

sin confusiones ni cambios las manos… sin señas como toca
un mago insistiendo sin prisa, hechas de sal duran.

aún me animan las texturas, las supongo pálidas
si después decimos porqué la prisa de mirar su aspereza,
el susurro escarpado de su color asumiendo el frío de elementos
que han dejado de creer, grietas sin luz, malabares de mañana,
un río en su apogeo reclamando soledad hasta ser olvido, disueltos
sus pliegues dormidos en un regazo que es cálido y oscuro -

Generalmente tus poemas se parecen a nuestro Río de la Plata, su 'textura' ese tinte turbio que pareciera espeso, como el chocolate tal cual debe ser, un color particular y distintivo, lleno de historias o visiones en su hurdimbre, que no siempre deja ver sus hilos, pero cuya trama está embuída de poesía. Un abrazo vecino, Luna.-

me llevo todas las texturas, un placer pasar por este interesante poema
javier

Un poema lleno de pliegues en los que adentrarse. Me llamó la atención tu capacidad para penetrar en lo más sutil. Te felicito por tu sublime poema.

Un abrazo

Hermoso e interesante poema de Macedonio.

Para disfrutar, esta propuesta tuya, con un buen vino tinto, decir cómo el autor comprende el fondo de las cosas que se nombran ante la luz, tocar con palabras que no tocan, decirlo así, magistralmente.

Siempre es una oportunidad poder leerte.

Abrazos, compañero.

RJL

Marius Gabureanu escribió:Tengo la impresion que este poema se eleva y se dora mientras uno está atento a los sabores misteriosos que llegan con la brisa,a lago, a peces lentos, asi veo yo tu poesia, siempre cumple las expectaciones, mi madre está alrededor mío, hay una mesa debajo de una cúpula de la que cuelgan pesadas uvas, yo leyéndote, pensado en las texturas, en esa parte del sueño, de tu sueño, que se me revela al leerte. Es un poema magistral, como muchos otros tuyos. Y se me llena el alma de alegria, sé que es un momento imperdible. recibe mis abrazos, querido amigo.

dejé pausas a todo esto, veo que el tiempo se va ablandando así recibe el sol y los aromas. muy otra cosa debe ser estar sentado ahí y te aseguro que suena bien. a veces los desafíos están del otro lado de donde uno estaba mirando y de repente las cosas cobran sentido. amigo, respira y disfruta

Luna: Generalmente tus poemas se parecen a nuestro Río de la Plata, su 'textura' ese tinte turbio que pareciera espeso, como el chocolate tal cual debe ser, un color particular y distintivo, lleno de historias o visiones en su hurdimbre, que no siempre deja ver sus hilos, pero cuya trama está embuída de poesía. Un abrazo vecino, Luna.-

Gracias Luna, qué lindo comentario

LLena las manos ...
Gracias