Editorial Alaire

El territorio de la luz me es ajeno.

Hay en las páginas blancas del verano
una desnudez interminable, un latir
de pieles sin rostro, un bronce desvaído
en la premura arcaica de los sexos.

Desde la fría invalidez de las habitaciones oscuras
la luz semeja un monstruo lánguido, un amante dulce
que embriaga los poros infaustos del deseo.

¿Qué verano es éste que se dibuja en mi memoria
como un sortilegio de paisajes,
de dunas amarillas,
de bosques húmedos
sin ti?

En la umbría todo parece nocturnidad,
un aire sin forma calienta los zócalos
de mi casa.

Hoy el silencio es azul como un mar celeste.

Ramón Carballal escribió:El territorio de la luz me es ajeno.

Hay en las páginas blancas del verano
una desnudez interminable, un latir
de pieles sin rostro, un bronce desvaído
en la premura arcaica de los sexos.

Desde la fría invalidez de las habitaciones oscuras
la luz semeja un monstruo lánguido, un amante dulce
que embriaga los poros infaustos del deseo.

¿Qué verano es éste que se dibuja en mi memoria
como un sortilegio de paisajes,
de dunas amarillas,
de bosques húmedos
sin ti?

En la umbría todo parece nocturnidad,
un aire sin forma calienta los zócalos
de mi casa.

Hoy el silencio es azul como un mar celeste.

Grande Ramón, este poema es de esos que se meten en el alma, porque la dibujan o la describen,
universalizando la intimidad más compleja e iluminándola.
Un abrazo desde un invernal sur, Luna.-

Suave, inminente y lleno de aciertos, Ramón.

Gracias por compartir, un abrazo fuerte.

Un silencio que impregna de azul melancolía el paisaje de la memoria. Hermoso poema, Ramón, te felicito. Un abrazo.

Un poema con la marca indeleble de un gran poeta. Honor a quien se lo merece.

Un abrazo fuerte.

José Manuel F. Febles

Me ha encantado cómo el verano alcanza reflejar lo perdido y se vuelve un espejo sombrío. Mis felicitaciones sinceras y abrazos.

Maravillosa creación, para quedarse, ajeno a esa luz, esperando el suceso, la estación que guarda una esperanza.

Gracias por compartir tu arte.

Un abrazo

RJL

Luna de Nos escribió:

Ramón Carballal escribió:El territorio de la luz me es ajeno.

Hay en las páginas blancas del verano
una desnudez interminable, un latir
de pieles sin rostro, un bronce desvaído
en la premura arcaica de los sexos.

Desde la fría invalidez de las habitaciones oscuras
la luz semeja un monstruo lánguido, un amante dulce
que embriaga los poros infaustos del deseo.

¿Qué verano es éste que se dibuja en mi memoria
como un sortilegio de paisajes,
de dunas amarillas,
de bosques húmedos
sin ti?

En la umbría todo parece nocturnidad,
un aire sin forma calienta los zócalos
de mi casa.

Hoy el silencio es azul como un mar celeste.

Grande Ramón, este poema es de esos que se meten en el alma, porque la dibujan o la describen,
universalizando la intimidad más compleja e iluminándola.
Un abrazo desde un invernal sur, Luna.-

Gracias, Luna, por tus generosas palabras. Un abrazo.

Hallie Hernández Alfaro escribió:Suave, inminente y lleno de aciertos, Ramón.

Gracias por compartir, un abrazo fuerte.

Gracias, Hallie, por tu lectura y comentario. Un abrazo.

Rosa Marzal escribió:Un silencio que impregna de azul melancolía el paisaje de la memoria. Hermoso poema, Ramón, te felicito. Un abrazo.

Muchas gracias, Rosa, por el comentario que me dejas. Un abrazo.

Ramón Carballal escribió:El territorio de la luz me es ajeno.

Hay en las páginas blancas del verano
una desnudez interminable, un latir
de pieles sin rostro, un bronce desvaído
en la premura arcaica de los sexos.

Desde la fría invalidez de las habitaciones oscuras
la luz semeja un monstruo lánguido, un amante dulce
que embriaga los poros infaustos del deseo.

¿Qué verano es éste que se dibuja en mi memoria
como un sortilegio de paisajes,
de dunas amarillas,
de bosques húmedos
sin ti?

En la umbría todo parece nocturnidad,
un aire sin forma calienta los zócalos
de mi casa.

Hoy el silencio es azul como un mar celeste.

Uff, me han llegado profundamente al alma estos preciosos versos. Gracias, señorón poeta.
Un beso

La metáfora viviendo en ese ambiente ajeno y frío de la desesperanza.
Desde el silencio los azules saben mucho a mar y mucho a cielo.

un abrazo

Qué bueno, Ramón, este verano con su desnudez, su luz y sus recuerdos, todo bien dicho con
el sello tan logrado que imprimes a tus poemas. Aplausos
Besos
Pilar

José Manuel F. Febles escribió:Un poema con la marca indeleble de un gran poeta. Honor a quien se lo merece.

Un abrazo fuerte.

José Manuel F. Febles

Gracias, José Manuel, por tus generosas palabras. Un abrazo.

Marius Gabureanu escribió:Me ha encantado cómo el verano alcanza reflejar lo perdido y se vuelve un espejo sombrío. Mis felicitaciones sinceras y abrazos.

Gracias, Marius, por la lectura y el amable comentario. Un abrazo.