Editorial Alaire

De un lado a otro,
atropelladamente, desconcertada,
serpenteando, hurgando en las entrañas de la ciudad,
como un vagón de cola del metro,
de barro y agua, sin problemas,
en el subsuelo de los suburbios,
la criatura que lo puede todo
y no se ve,
que alcanza las mil y una formas
y no se notan,
parece muy cansada, angustiada,
gesticula con los versos,
me mira fijamente a los ojos,
deslumbran sus pupilas amarillas,
roza mis pómulos
la púrpura de sus labios
me susurra al oído:
en un quirófano ó en una palangana,
¿adónde alumbrarán al último ángel?

Alucinante, Manuel:

Es un poema impactante, para reflexionar sobre la falta de humanidad en la que estamos inmersos...

Aplausos
Besos
Ana

Un placer pasar por tu obra, creo en los ángeles, innovador.
javier

Deja ese sabor ácido de lo que queda por hacer. Alumbran los versos con tremendo realismo.
Besos
Pilar

Me ha encantado, Manuel. La idea, la forma, el encanto.

Me uno a los compañeros para aplaudirte.

Gracias por compartir tan buenas letras.

Abrazos y felicidad.

Qué bueno. Hermoso poema, hermoso broche final. Un abrazo y feliz día,

Judit

Qué poemazo, Manuel.

Ovación reiterada.

Manuel, belleza en ese estar sin ver, en ese ver sin estar,o en ese estado
imaginativo donde un fantasma angel se pone al lado de tu buen poema.

un abrazo

Creo que con tu llegada a estos foros poéticos, Alaire hizo uno de los mejores fichajes de sus últimos tiempos. Tanto en tus comentarios como la en creación poética tus aportes rebosan originalidad, inteligencia y muchas veces, como en esta entrega esa fina ironía que da la experiencia vital y artística.

Un abrazo, querido amigo.

Aprovecho ahora que puedo para decirte que me parece un poema soberbio, me impactó cuando lo leí.El manejo del concepto, la síntesis sin elisión y su honda implicación humana me parecen admirables.Un placer, Manuel.Abrazos.

Ana, agradezco hayas comentado el poema, eres muy amable, un beso.

Javier, gracias por el comentario, eres muy amable, un abrazo.

Manuel Alonso escribió:De un lado a otro,
atropelladamente, desconcertada,
serpenteando, hurgando en las entrañas de la ciudad,
como un vagón de cola del metro,
de barro y agua, sin problemas,
en el subsuelo de los suburbios,
la criatura que lo puede todo
y no se ve,
que alcanza las mil y una formas
y no se notan,
parece muy cansada, angustiada,
gesticula con los versos,
me mira fijamente a los ojos,
deslumbran sus pupilas amarillas,
roza mis pómulos
la púrpura de sus labios
me susurra al oído:
en un quirófano ó en una palangana,
¿adónde alumbrarán al último ángel?

Lo vertiginoso de este poema hizo que al llegar a la pregunta final, debiera regresar al comienzo, para disfrutar doblemente de él. Me gustó mucho Manuel, un gusto leerte, un abrazo, Luna.-

Manuel Alonso escribió:De un lado a otro,
atropelladamente, desconcertada,
serpenteando, hurgando en las entrañas de la ciudad,
como un vagón de cola del metro,
de barro y agua, sin problemas,
en el subsuelo de los suburbios,
la criatura que lo puede todo
y no se ve,
que alcanza las mil y una formas
y no se notan,
parece muy cansada, angustiada,
gesticula con los versos,
me mira fijamente a los ojos,
deslumbran sus pupilas amarillas,
roza mis pómulos
la púrpura de sus labios
me susurra al oído:
en un quirófano ó en una palangana,
¿adónde alumbrarán al último ángel?

Impresionante y magnífico poema. Mi felicitación sincera.
Un abrazo.
BEGOÑA.

Hola, Manuel, me encantó el poema. Me resultó un texto de esos que están vivos; sobre todo cuando describe al ser que serpentea angustiado y se recita en versos. El final impactante, un flechazo directo.

Mi enhorabuena, un abrazo.