Editorial Alaire

Así la cintura cósmica
sin los cascabeles del sueño,
baila en tus dedos,
en la polvorienta butaca de mi alma.
Rueda tu música desnuda
y tu rostro rueda en los perfumes de la música
y de sus llamas húmedas,
sediento su cauce me amuralla.
Así es un instante sin tenernos.
Así los cuerpos que dejamos un instante,
para el dolor del júbilo y su alianza que venera
de memorias suicidadas en los labios.
Así de mi corazón al tuyo, el próximo latido,
bajo el telón de mayo, en su sordera anónima.
Pero quienes somos y entonces
bajo qué obra gobernamos alegrías,
tú y yo que pintamos de musgo los renglones
enfermos de la sal y de la noche
y nos duele la misma palabra que se hunde
y nos hiere la impaciencia de su voz que naufraga
y las ruinas y sus silencios como islas
hasta morir la voz, cada mañana,
hasta despojamos para ser silencio.

Te despojo, querido amigo, y libero de este cero, pues es un poema magnífico, y nos duele la misma palabra que se hunde y nos hiere la impaciencia de su voz que naufraga, como tu muy bien dices en esos hermoso versos. Es un placer leerte, recibe un fuerte abrazo.

Magnifico poema, pleno de versos hermoso. Un placer la lectura.
Un abrazo.
Pepa

Evocador, hermoso e inteligente. querido compañero.
Van un montón de aplausos y gracias siempre por dejar belleza en las páginas de Alaire.

Abrazos.

Cuanto más avanza, Ricardo, más hermoso se torna, hacia el final abandonas versos impresionantes que quedan encallados en su significado y en la desesperación del amor que siempre busca una canción para explicar lo inexplicable, un poema para acompañar la soledad de islas de todos los naufragios.

Un abrazo.

Ya el título es hermoso y cuando te adentras en el poema se llena de belleza y luz. Precioso.
Besos
Pilar

Sí, el título es tan sinestésico, denota un prurito de sensualidad, de misticismo, de unión.
Los cuatro primeros versos son lúcidos, reveladores, porque le dicen al lector que se trata de una experiencia consciente, de voluntad total. Un placer, Ricardo. Abrazos.

Idiosincrasia poética bajo el lirismo sensible para reflexionar amorosamente
en una introspectiva sentimentalidad mecida de silencio.

un abrazo

Hermoso poema. Me ha gustado leerlo. Abrazos.

Belleza y sensibilidad. Un placer de lectura. Feliz día y un abrazo,

Judit

Hermoso e interesante poema de Ricardo.

Manuel Alonso escribió:Te despojo, querido amigo, y libero de este cero, pues es un poema magnífico, y nos duele la misma palabra que se hunde y nos hiere la impaciencia de su voz que naufraga, como tu muy bien dices en esos hermoso versos. Es un placer leerte, recibe un fuerte abrazo.

Estimado Manuel, tu palabra que atesoro, muchas gracias compañero. Un saludo grande. RJL

Ricardo José Lascano escribió: Así la cintura cósmica
sin los cascabeles del sueño,
baila en tus dedos,
en la polvorienta butaca de mi alma.
Rueda tu música desnuda
y tu rostro rueda en los perfumes de la música
y de sus llamas húmedas,
sediento su cauce me amuralla.
Así es un instante sin tenernos.
Así los cuerpos que dejamos un instante,
para el dolor del júbilo y su alianza que venera
de memorias suicidadas en los labios.
Así de mi corazón al tuyo, el próximo latido,
bajo el telón de mayo, en su sordera anónima.
Pero quienes somos y entonces
bajo qué obra gobernamos alegrías,
tú y yo que pintamos de musgo los renglones
enfermos de la sal y de la noche
y nos duele la misma palabra que se hunde
y nos hiere la impaciencia de su voz que naufraga
y las ruinas y sus silencios como islas
hasta morir la voz, cada mañana,
hasta despojamos para ser silencio.

Quizá lo más duro de admitir sea que en los cruces críticos saltamos solos. Un poema de descarnada belleza. Con admiración y respeto, Ricardo. ERA
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Precioso poema. Me ha encantado. Un abrazo.

Ricardo, un poema que rueda por los senderos de excelente metáfora para expresar una soledad compartida, un poema de amor que profundiza sobre los gestos de la noche y la mímica de la sal, como un beso irrecuperable. Felicitaciones, querido amigo, leerte es siempre un regalo para el alma.