Editorial Alaire

DONDE ESTABA ÉL


De joven me gustaba mirar por la ventana
y ver pasar la gente y vislumbrar
así mi porvenir. Más allá de los cristales
pensaba en mi futuro. Evocaba mi aspecto, mi vida;
me preguntaba dónde estarían en mi entonces
las cosas importantes de mi ahora.
(Un día vi pasar a un hombre que parecía
estar como buscando. Se paró. Se sentó en un banco.
De pronto miró hacia arriba y me vio observando
detrás de la ventana. Había algo extraño en sus pupilas,
como una fina niebla que me acabó dejando
atónito y perplejo.
Aparentaba estar perdido, desconcertado.
Nunca más volví a verle. En ese instante
dejé de imaginar mi porvenir).
…………………………….

Ahora soy un hombre, digamos, de mediana edad.
Tengo otra vida. Soy otro muy distinto siendo el mismo.
Sé cuáles son las cosas importantes de mi presente
y dónde han ido aquellas que lo fueron
del pasado.
(No hará mucho,
cuando me dominaba la nostalgia por una edad
que ya no volverá, me iba a pasar el rato a ese barrio
azul donde crecí. Me gustaba visitar mi antigua casa,
sentarme en un banco ante su puerta y recordar
mirando a sus ventanas. Esto se convirtió
en algo rutinario para mí. Hasta que un día
de pronto vi a un joven que me observaba fijamente
detrás de los cristales. Parecía atónito, absorto, pensativo.
Su mirada era fría y transparente, como una fina niebla
venida de muy lejos.
Y entonces comprendí).

Ya no he vuelto de nuevo por el barrio.
Ya no busco mi vida en el futuro.
Llegó la madurez. Transito ahora
por ese porvenir que siempre estuvo
delante de ese joven que miraba
detrás de una ventana.

Con el tiempo acabé por alcanzarme. Al fin estoy
donde estaba él.


--oOo--

Hermosísimo poema, José Manuel, con ese estilo tan tuyo de contarnos la vida, de hacer que
sintamos cada retazo de tu tiempo. Me gustó y lo disfruté.
Abrazo grande
Pilar

Hay belleza serena en tu poema. Precioso.

Con el tiempo acabé por alcanzarme.

Qué hermosa esta imagen.
Feliz día.

Judit

Toda edad y todo tiempo hay que acoplarlo al porvenir. Lo pasado es
experiencia y el presente práctica,pero se acaba a cada instante.

De la nostalgia qué decir si todo lo que pasa ya es pasado.

Muy grata lectura moralejeada y todo.

un abrazo

Maravilloso, José Manuel:

Escribes genial. Se siente esa sensación de "fugacidad de la vida" a través de tu poema.

Felicitaciones
Un beso grande
Ana

Hermoso e inteligente manejo del tema; la vida como referente del tiempo,
trayecto en espiral que en cada giro nos acerca de nuevo a puntos ya transitados.
Tu poema nos muestra, en una atmósfera tan cotidiana como misteriosa,
la magia de uno de esos momentos, cuando cruzamos miradas con lo que
seremos desde quienes ya fuimos.

Un fuerte abrazo, José Manuel.