Editorial Alaire

El tigre (a mi padre)


Soy el tigre que nota en sus orejas
la voz subliminal que le alimenta,
quien mastica en sus fauces la sedienta
orfandad de las horas, y te alejas…

Mi realidad se frota con las rejas,
de lado a lado, con sonrisa lenta,
clavando en cada sombra que te inventa
la luz retráctil de mis uñas viejas.

No consigo alcanzar ese secreto
cautiva mente libre, la palabra
que puebla tus antiguas moralejas.

Pero seré paciente, lo prometo,
y escapará mi tú cuando se abra
esta jaula de sueños que me dejas.



Luis Oroz.

Qué grande y hermoso este ejercicio de amor, Luis. La figura del tigre, su fuerza rayada, su elegante movimiento de felino que no cede ni un milímetro de su bravía libertad. Las rejas, los muros, las prisiones; son sólo un templo rasgado si el animal ruge su maravillosa identidad.

Beso y abrazo, querido compañero.

Me alegra en ser la primera en llegar y decirte que es un soneto hermosísimo y que agradecer y
que dejarse poseer por los recuerdos paternos es saber corresponder y ser buena persona.
Felicidades por tu buen hacer
Besos
Pilar

Hola amigo, precioso soneto y hermoso final, un fuerte abrazo.

Hermoso, profundo y solemne homenaje a la memoria del padre que se aleja, conmueven y convencen cada una de las imágenes que con gran plasticidad bosquejan ese querer rescatar y abarcar todo en la memoria, para evitar sufrir más pérdidas. Felicitaciones, un gusto enorme pasearme entre tus líneas.

Hermoso soneto, Luis, en el que evidencias tu talento y tu rica experiencia poética.
Si a la belleza del poema en sí le unimos la destreza con que está confeccionada su arquitectura técnica, nos encontramos con esto: con una verdadera obra de arte poético.
Ta felicito muy cordial y sinceramente y te envío un abrazo muy fuerte.
Jerónimo

Ay, esos retos que surgen espirituosamente colmados, son muy agradables, amigo Luis. El caso es que nos gusta mucho hacer una larguísima sobremesa poética. Que si esto, que si lo otro... Nos retroalimentamos literariamente. En este punto, se añora a los compañeros, a ver si próximamente podemos organizar una reunión en Madrid. Hace mucho que no nos vemos.

En fin, toca el endecasílabo. Aunque acordamos un soneto, en la segunda estrofa me sentí con ganas de seguir escribiendo, al terminarla, pensé que tú habrías escrito 14 versos, así que me decidí por un terceto pensando que serían 14 versos en total. Me di cuenta de que había escrito 13, cuando leí a Hallie.

En cuanto a tu soneto, me parece un excelente ejercicio métrico-estilístico para desentumecer las neuronas líricas; como es natural en un autor de tu nivel, estés más o menos inspirado, siempre consigues buenos versos y, claro, este soneto está trufado de ellos, diría que en esta ocasión coincidiendo con la última parte de cada estrofa.

Transgresor con la rima -consonante y asonante en los cuartetos-, no faltas a la cita con los juegos e invenciones de palabras, con lo que podrías poner los pelos de punta en algunos academicismos...

Ha sido un placer leerte. Felicidades por el soneto. Por cierto, ya que estamos, que siga el reto, “tempus fugit”, no sé, en este lago puente, podríamos escribir varios poemas, pero sin medida ni nada predeterminado, a lo que salga. Por ejemplo, para el Viernes Santo, otro poema (después podemos incluirlos en el libro).
Un fuerte abrazo, colega.

Una maravilla de soneto, el de ese tigre encerrado, impotente ante la pena. El poema está trufado de muy hermosos hallazgos rítmicos (cautiva mente)

¡Cómo os lo montáis en esos retos! ¡Qué envidia! Bueno… pensándolo bien mejor no, porque la cosas hubiese sido poesía explosiva, muy alcohólica.

Dentro de un rato iré a la otra parte del reto.

Se te echó de menos en Bilbao. Estuvo bien la cosa.

Un fuerte abrazo.

De muy poquitos poetas (así llamados a sí mismos) aprendo como lo hago cuando tengo la suerte de que un poema tuyo caiga en mis manos. Tú no necesitas llamarte poeta a tíi mismo, ya te lo llamo yo. Es un soneto impecable en todos sus aspectos. Felicidades.

Un honor formar parte de este grupo de alto lirismo gracias por tanto talento
javier

Es un poema muy bello y sentido, lo he disfrutado en cada lectura. Saludines.

Hallie Hernández Alfaro escribió:Qué grande y hermoso este ejercicio de amor, Luis. La figura del tigre, su fuerza rayada, su elegante movimiento de felino que no cede ni un milímetro de su bravía libertad. Las rejas, los muros, las prisiones; son sólo un templo rasgado si el animal ruge su maravillosa identidad.

Beso y abrazo, querido compañero.

Mil gracias, queridísima amiga, por tu generosa mirada.
Le tengo muchísimo respeto al soneto clásico, mucho más que antes, cuando me lanzaba sin pudor.
Pero creo que es bueno, a veces, pinchar y ver si hay sangre, si es posible sangrar desde donde pareces tener hielo.

Un besazo, amiga.

Pilar Morte escribió:Me alegra en ser la primera en llegar y decirte que es un soneto hermosísimo y que agradecer y
que dejarse poseer por los recuerdos paternos es saber corresponder y ser buena persona.
Felicidades por tu buen hacer
Besos
Pilar

Muchas gracias, Pilar. Realmente estamos hechos, más allá de la genética, de lo que van impregnando en nosotros inconscientemente. Muchísimo más potente que el aprendizaje concienzudo, y que marca nuestro paso por el mundo. Sudece que siempre llegamos tarde a decir lo verdaderamente importante, pero da lo mismo, es un ciclo que tal vez ha de seguirse para seguir siendo lo que sigue.

Un besazo, compañera.

Sentido, profundo, recto. Un magnífico soneto, con ingenio,
voz y sueño

un abrazo

Un soneto de amor, con la elegancia propia de su autor. Magnificas figuras Felicidades.
Un fuerte abrazo.

José Manuel F. Febles