Editorial Alaire

Cuando miro hacia atrás encuentro un camino de pájaros sembrados en el bosque espeso de mi cuerpo
Ya no pensamos en el cielo obtuso de la infancia que nos desveló con sus incandescentes lagrimas artificiales Ni en ese migrar de las estaciones oscuras Donde visitamos sonámbulosla morgue tibia de las aves
Algún día los poemas te sacarán los ojos Cantaba mi madre en el patio traserobajo la sombra oscura de los antiguos cipreses
Yo me cubría los dedos con la sangre caliente que bajaba por la espalda del sol y sonreíaTratando de esconderme la temprana ceguera

Just.

Tendrá razón tu madre, a los poetas los poemas les sacan los ojos, y los colores, y hasta las entrañas. O quizá sean los propios poetas los que utilizan a los poemas para dejarse arrancar trozos de vida, de sensaciones, de ausencias. La poesía está en la piel, los ojos sólo son el medio para interpretarla.

Pero se nos van secando los cipreses, y los patios traseros han ído dejando de ser parte de la casa.

Sólo permanecen los poemas, con ojos de poeta, en la morgue tibia de las aves.

Un poema para la reflexión, para la evocación, para mirarse hacia adentro, con o sin ojos.

Un abrazo.

Santiago Redondo Vega

En primer lugar bienvenido Just, me alegra encontrarte en este lugar de poesía.

Este verso me ha impresionado, qué verdad más grande has dejado en tan pocas palabras...


Algún día los poemas te sacarán los ojos


Un abrazo

Sara

Just Gafar,
QUE BUENO QUE ESTÉS POR AQUÍ

BIENVENIDO CON TU MAGNÍFIXCA POESÍA, QUERIDO AMIGO

UN ABRAZO FUERTE

Amigo poeta, que hermosa manera de ver el poema, de sobrepasar los ojos tibios del poema.

Gracias por inaugurar mis versos

abrazos en la distancia

Sara

Celebro tu bienvenida, tus palabras, muchas gracias por venir a mi ventana.

un abrazo enorme, que le rompa la espalda a la distancia

Mi querido Maestro, muchas gracias por venir, sabes que guardo tu cariño aquí, muy cerca de donde me nacen las palabras.


Abrazos, muchísimos abrazos

Yo me cubría los dedos
con la sangre caliente que bajaba por la espalda del sol
y sonreía
Tratando de esconderme la temprana ceguera

Muy buena entrega amigo, y esta última estrofas bellisimas, material poético que se degusta con fruición por lo generoso de su lírica nostalgia.

Un abrazo

Tu poesía esta en un diamante que cae lentamente de una colina. Por donde cae, va dejando flores.

Just Gafar escribió:Cuando miro hacia atrás encuentro un camino de pájaros sembrados en el bosque espeso de mi cuerpo
Ya no pensamos en el cielo obtuso de la infancia que nos desveló con sus incandescentes lagrimas artificialesNi en ese migrar de las estaciones oscuras Donde visitamos sonámbulosla morgue tibia de las aves
Algún día los poemas te sacarán los ojos Cantaba mi madre en el patio traserobajo la sombra oscura de los antiguos cipreses
Yo me cubría los dedos con la sangre caliente que bajaba por la espalda del sol y sonreíaTratando de esconderme la temprana ceguera

Recojo, en su belleza total y excelente decir, todo el poema Despertar, a la par que te expreso mi particular alegría por poderte leer en este espacio, Just, y con mi saludo te envío un abrazo.

Salud.

Algún día los poemas te sacarán los ojos

Hay miradas que sirven para mucho más que una visión, es tu caso en este poema que tratas con absoluta elegancia.
El poeta crea o recrea un mundo personal, pero absolutamente transferible, esa es la virtud y la llave para abrir las puertas de la piel.
Precioso poema, amigo.

Un abrazo.

Luis Oroz.

Gracias por estas palabras poeta, realmente me siento muy honrado de tenerte en mi ventana, en mi ceguera.


Mi saludo y mi admiración en la distancia

Me sorprende encontrar un poema,con el mismo título de un poema mío, que recién publiqué este mes pero más aún, me sorprende que sea una especie de conciencia que me hablara y respondiera a mi despertar. Mi madre nunca me dijo lo que a ti, sinembargo, me han sacado los ojos.
Me ha encantado tu voz poética profunda y plagada de hermosas y fortísimas imágenes. Saludos poeta.

No mi querido amigo, tú eres el diamante, la flor que crece dia a dia como palabra, detrás del vientre de la colina.


Es una gran alegría enorme tenerte en mi ventana


Mi abrazo, mi amistad

Ayyy mi querido Julio!!!!, no sabes como me alegra encontrarte, como me nace la risa cuando vienes a mi encuentro.

Tú sabes como me enorgullece llamarte mi amigo


Mi abrazo, de siempre