Editorial Alaire

Presiento que regresas con la liturgia del pasado,
invades el instante como un sutil escalofrío,
pero no estás, sólo eres fallido intento
y el tacto vacío de tu piel se hace ejercicio de nostalgia
que sobrevuela mi corazón de espuma.
A veces su latido se convierte en la cadencia del mar:
líquida balada en los pentagramas de mi cuerpo
cuando en soledad por sus heridas llora.

Envíame tu paz,
ahora que la primavera es un potro de inquietud
y desbocado galopa en la memoria.
En el lupanar de la noche eclosiona el vértigo de su trote
donde el preludio de tu carne, que aún permanecía núbil,
a través de un plenilunio de pasión va descubriendo
el vino del deseo que arde ya en la sangre
y se ha de beber en ánfora de estrellas:
¿será la ebriedad del rocío mi testigo?
Sospecho que cuando el alba se despierte
te irás diluyendo igual que una sombra ingrávida,
por eso jamás he de encontrarte y me sentiré
lo mismo de abatido que un crepúsculo apagado.

Cuando tu palabra naufraga en el silencio
y en el germen del futuro tu ausencia se acomoda,
eres como el eco de un pulso adormecido,
aunque mi corazón te presienta nacer como una orquídea
y no haya olvidado que grabé tu nombre aquel amanecer
en los sauces desnudos junto al río.

Bellísimo, Rafael. Un gran despliegue de recursos y emotividad.

Aplausos y gracias por compartir.

A veces su latido se convierte en la cadencia del mar:
líquida balada en los pentagramas de mi cuerpo
cuando en soledad por sus heridas llora.

Envíame tu paz,
ahora que la primavera es un potro de inquietud
y desbocado galopa en la memoria.



La emisión con la palabra como un impulso íntimo respiratorio, se confabula con los paisajes subterráneo por donde se deja ir el poeta. Aprovecho para dejarte mi cordial abrazo, Rafael. Gracias por esta hermosa participación tuya.


O. Llombart.

Rafael buen poema amigom te felicito, me ha gustado mucho, sobre todo la última estrofa, un abrazo.

Hallie gracias por pasarte por mis versos y dejar tus palabras

saludos

rafael

Nimaos gracias por pasarte por el poema y dejar tus palabras

saludos

rafael

Esta ausencia etérea se configura como una entelequia que vaga por los deseos, por el pensamiento, casi antes que la nostalgia, pues parece un sentimiento que brota de un hecho anterior ligado con la propia búsqueda.
Un placer atravesar estos versos
Un abrazo

Rafael Valdemar escribió:Presiento que regresas con la liturgia del pasado,
invades el instante como un sutil escalofrío,
pero no estás, sólo eres fallido intento
y el tacto vacío de tu piel se hace ejercicio de nostalgia
que sobrevuela mi corazón de espuma.
A veces su latido se convierte en la cadencia del mar:
líquida balada en los pentagramas de mi cuerpo
cuando en soledad por sus heridas llora.

Envíame tu paz,
ahora que la primavera es un potro de inquietud
y desbocado galopa en la memoria.
En el lupanar de la noche eclosiona el vértigo de su trote
donde el preludio de tu carne, que aún permanecía núbil,
a través de un plenilunio de pasión va descubriendo
el vino del deseo que arde ya en la sangre
y se ha de beber en ánfora de estrellas:
¿será la ebriedad del rocío mi testigo?
Sospecho que cuando el alba se despierte
te irás diluyendo igual que una sombra ingrávida,
por eso jamás he de encontrarte y me sentiré
lo mismo de abatido que un crepúsculo apagado.

Cuando tu palabra naufraga en el silencio
y en el germen del futuro tu ausencia se acomoda,
eres como el eco de un pulso adormecido,
aunque mi corazón te presienta nacer como una orquídea
y no haya olvidado que grabé tu nombre aquel amanecer
en los sauces desnudos junto al río.

Hermoso poema, Rafael,con él cierro la noche para soñar la belleza de estas imágenes. ERA

Manuel gracias por pasarte por mis versos y dejar tus palabras

saludos

rafael

Emotivo y bello, Rafael. Es verdad que tiene una similitud con mi poema
acerca del desamor...

Un placer, saludos.

Siempre disfruto con la lectura de tu poesia serena, meditada y no exenta de belleza. Mi felicitación por el poema y un abrazo.

Todo ejercicio de nostalgia es una lucha del amor. Hay belleza y un pulso que se mantiene.

Me ha gustado mucho.

Un abrazo.

Rafael Valdemar escribió:Presiento que regresas con la liturgia del pasado,
invades el instante como un sutil escalofrío,
pero no estás, sólo eres fallido intento
y el tacto vacío de tu piel se hace ejercicio de nostalgia
que sobrevuela mi corazón de espuma.
A veces su latido se convierte en la cadencia del mar:
líquida balada en los pentagramas de mi cuerpo
cuando en soledad por sus heridas llora.

Envíame tu paz,
ahora que la primavera es un potro de inquietud
y desbocado galopa en la memoria.
En el lupanar de la noche eclosiona el vértigo de su trote
donde el preludio de tu carne, que aún permanecía núbil,
a través de un plenilunio de pasión va descubriendo
el vino del deseo que arde ya en la sangre
y se ha de beber en ánfora de estrellas:
¿será la ebriedad del rocío mi testigo?
Sospecho que cuando el alba se despierte
te irás diluyendo igual que una sombra ingrávida,
por eso jamás he de encontrarte y me sentiré
lo mismo de abatido que un crepúsculo apagado.

Cuando tu palabra naufraga en el silencio
y en el germen del futuro tu ausencia se acomoda,
eres como el eco de un pulso adormecido,
aunque mi corazón te presienta nacer como una orquídea
y no haya olvidado que grabé tu nombre aquel amanecer
en los sauces desnudos junto al río.

He disfrutado mucho leyendo un poema lleno de belleza.

Ventura gracias por pasarte por mis versos y dejar tus palabras

saludos

rafael

Aristy gracias por pasarte por misversos y dejar tus palabras

saludos

rafael