8 de febrero
Publicado: Lun, 10 Feb 2014 3:30
8 de febrero
borde que afuera llueve
hasta no encontrar aire,
acaso imposible llueve
a poco más que explorar
en el nombre de ese afuera.
Luz ciega de borde que brilla
de la forma más oscura
que resbala en las cosas
hasta nombrarles el frío,
la ocasión, la vida.
gotas tocan con una llave
la memoria. Lo que vimos
del corazón nunca vuelve.
Lluvia repartida, tu espalda
es el límite de la lluvia, arde
en cada hueco lo que cae
ahora que rodea es su ruido
tenaz lo que ilumina, cubre
como un borde seguro, puede
ser irrepetible, es decir se va.
gotas que son preguntas
de una sonoridad del cielo
todavía demorada
en otras generaciones,
han ignorado el decir,
buscan su causa
en la intemperie,
en eso acuerdan, que ahora
que han llegado, encontraré
cosas que se habían perdido.
debo apurar el tramo
último de huirme,
poder reírme digo,
ser un cuenco lleno
con luz de tus ojos
y olor que dejó la lluvia.
Inexpresables son las pausas
de un continuo volver a ser,
despliegan un silencio
que brilla despejado..
borde que afuera llueve
hasta no encontrar aire,
acaso imposible llueve
a poco más que explorar
en el nombre de ese afuera.
Luz ciega de borde que brilla
de la forma más oscura
que resbala en las cosas
hasta nombrarles el frío,
la ocasión, la vida.
gotas tocan con una llave
la memoria. Lo que vimos
del corazón nunca vuelve.
Lluvia repartida, tu espalda
es el límite de la lluvia, arde
en cada hueco lo que cae
ahora que rodea es su ruido
tenaz lo que ilumina, cubre
como un borde seguro, puede
ser irrepetible, es decir se va.
gotas que son preguntas
de una sonoridad del cielo
todavía demorada
en otras generaciones,
han ignorado el decir,
buscan su causa
en la intemperie,
en eso acuerdan, que ahora
que han llegado, encontraré
cosas que se habían perdido.
debo apurar el tramo
último de huirme,
poder reírme digo,
ser un cuenco lleno
con luz de tus ojos
y olor que dejó la lluvia.
Inexpresables son las pausas
de un continuo volver a ser,
despliegan un silencio
que brilla despejado..