Editorial Alaire

Esta ciudad de sombra
nos cobija en sus calles de silencio.

Los coches aparcados en hileras
sueñan en soledad.

Relojes sumergidos en el tiempo
hablan de la otra historia.

Sucedáneos del eco
se escuchan por las plazas del presagio.

Intuimos el miedo en las aceras
y caminamos rápido al zenit de la luz.

Los portales abiertos en la noche
albergan los abrazos más ocultos.

Observamos los árboles
en las avenidas luminosas
y los escaparates de las tiendas
nos ofrecen artículos inútiles.

Esta ciudad de espejos laberínticos
nos conduce a otros mundos intangibles.

Bibliotecas de cuento
se alzan sobre vórtices de bruma.

La llovizna ha hechizado los parques del subsueño.

Noctámbulos los pasos nos dirigen
al centro de la urbe, donde todo es real
incluso aquellas máscaras antiguas
de transeúntes sin heridas.

La hermandad de la niebla
nos envuelve con su frío
en la desolación del habitante
que puebla
esta ciudad sin nombre...


Ana Muela Sopeña

Bello poema de Ana.

Gracias, Rafel, por dejar tu huella entre estos versos.

Un fuerte abrazo
Ana

Y yo me paseo por esas calles de sombra donde retumba el eco de la melancolía, y me dejo hechizar por tus versos. Un placer leerte, Ana. Besos.

Gracias, Rosa, por pasearte por esa sombra y acompañar estos versos con tus palabras.

Un beso
Ana

Es un placer, el pasear por los versos de tus calles, y eso que no me gusta la nocturnidad.
Un abrazo grande a tu talento.

Ana, es un poema sobrio y magnífico, breve pero intenso, te felicito amiga, un beso.

Un gran poema, Ana, un placer recorrer tus calles y dejarse envolver por esas sombras. Bello poema.

Un abrazo.

carmen

Ana Muela Sopeña escribió:"Esta ciudad de sombra
nos cobija en sus calles de silencio.

Los coches aparcados en hileras
sueñan en soledad.

Relojes sumergidos en el tiempo
hablan de la otra historia.
......................."

Ana Muela Sopeña

Estimada Ana:
Todas las calles de todas las ciudadestienen sus zonas de sol y de sombrasal menos algún tiempode un día soleado.
Y el silencio, similar a la sombra,también tiene rinconesdonde puede dormir y descansaraunque sólo sean unos instantesa lo largo del día o de la noche.
También los coches duermen y descansan,de noche o de día,cuando una llave gira y sale de su cuerpo,dejando en desamparoel bullir de engranajes y correas.
Entre tanto no duermen los relojesporque su dueño, el tiempo,no descansa tampocoy a ellos les exige que marquen su tictac,con la cierta amenazade acabar con su alma en la basurasi dejasen de hacerlo.
Hermoso tu poema,que me prestó la inspiración.
Un ABRACIBESO,(palabra inventada por mí,y que espero me acepte la RAE).* * *
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[quote="Ana Muela Sopeña"]

La magia y la fantasmagoría de la noche se descuelgan de verso en verso. He recorrido estos callejones con placer.
Un abrazo.

Pienso, Ana, que has logrado transmitir con autenticidad tu mensaje, esa ciudad de sombra parece ir mostrándonos su rostro a través de unos versos que nos describen una cierta desolación evitando aspavientos inútiles. Te ha quedado muy bien el poema.

Un abrazo.

Recorrer tus versos es adentrarse en el paisaje urbano que habitan y los habita, percibiendo la vida que palpita en el. Un placer grande leerte.
Un abrazo.
Pepa