Editorial Alaire

Entre lluvia te veo en lejanía
y mis labios te siguen por las calles.

Hay huellas de fragancias por aceras
en las marquesinas de autobús.

Tus manos y mis manos se entrelazan
con farolas que huyen
de la tristeza apátrida.

Edificios de infancia nos descubren
los dedos que se imantan a la luna.

Mi piel es tu refugio
y tus ojos de océano
deslizan por mi cuerpo
calendarios atados a un presagio.


Ana Muela Sopeña

Ana, tienes el don de la metáfora.
Me encanta tu escritura.

Abrazos de nuevo.

"Mi piel es tu refugio
y tus ojos de océano
deslizan por mi cuerpo
calendarios atados a un presagio."

Estos versos finales son de un alcance extraordianario, querida Ana.

Enhorabuena y un beso grande.

Un gran poema, Ana, a pesar de su concisión, porque concisa debe ser la poesía; y, además, como este poema tuyo, profundamente expresivo. Una bella canción de amor cantada con la delicadeza de tu voz.
Abrazos.
Jerónimo

La lluvia es un elemento que aparece de manera recurrente en tus poemas, luego me fijo y leo que eres de Bilbao, eso aclara muchas cosas .
Me encantan las tardes de lluvia, en el poema, muy hermoso, crea una atmósfera perfecta.

Un abrazo Ana.

Hermoso amor se moja de la lluvia cantando de tu poema hermoso. Un saludo.

Precioso, Ana, un poema de una delicadeza grande, como es tu palabra.
Besos
Pilar

Gracias, Concha:

Me alegra que te guste.

Un beso
Ana

Hallie, tus comentarios son siempre un lujo.

Agradecida quedo...

Un beso grande
Ana

Jerónimo:

Agradezco mucho tu paso por mis letras.

Un fuerte abrazo
Ana

Israel:

Así es. Nací en Bilbao. Aquí llueve muchos días seguidos. A veces ni siquiera es lluvia. Es una llovizna tenue: el sirimiri.

Las tardes de niebla con lluvia fina son muy habituales. Y créeme...son bastante poéticas.

Por supuesto también los días de sol son hermosos, pero aquí si no amas la lluvia y la niebla estás perdido. Hay gente que tiene depresión por tener que soportar días de lluvia. Un día y otro día y otro...A veces llueve veinte días seguidos sin parar.

A mí me gusta la lluvia. Me adapto a todas las condiciones climatológicas. Se puede decir que soy todoterreno.

Un abrazo
Ana

Daniel:

Muchas gracias por enredarte entre mis versos y brindarme tus palabras.

Un fuerte abrazo
Ana