Editorial Alaire

Sonido de agua dentro,
dentro.

Mi padre me enseñó la historia de una equivocación.

Descubrió edificios de arcos, cánticos de un siglo moribundo,
imágenes de hombres perdidos entre la luz y la locura.

He allí el refugio, la paz, la memoria de los viajeros,
la cúpula del ayer, tu canción-eso dijo-.

Por el día las pisadas de los mustélidos acompañaban al reloj,
la química de mis pasos regurgitaba en la piel del mármol,
viejas escaleras que lloran.

¿Quién me visitará aquí si aún hay rostros del pasado,
caras muertas y cuerpos de alquimia?

No voy vestido como debiera, lo sé por las miradas
que huyen al presentir los anillos de mi sonrisa.

Sonido de agua en el esmalte del cristal,
ventanas desportilladas que no tienen patria.

Alguien me dice que la noche grita, que la busque,
que la ame como a un dios caído.

Si, pero eso será mañana.

Cada día me quedo más y más en tus poemas. Me encanta el equilibrio que has conseguido. Gracias por acercarnos a la belleza.
Besos
Pilar

Que tres primeros versos tan buenos, tan evocadores, creo que he escuchado
el ruido del agua mientras los leía y querido saber de esa equivocación. Ramón,
te aseguro que leerte es un lujo. Felicitaciones, amigo.

Unha aperta.

Carmen

"Alguien me dice que la noche grita, que la busque,
que la ame como a un dios caído.

Si, pero eso será mañana."

Una carga de belleza irremediable atraviesa todo el poema; y estos versos finales son maravillosos.

De pie para los aplausos, Ramón.

Abrazos y felicidad.

Ramón me ha encantado el poema y el cierre me parece genial. Muchos abrazos y felicitaciones sinceras, amigo.

Sonido de agua en el esmalte del cristal,
ventanas desportilladas que no tienen patria.

Alguien me dice que la noche grita, que la busque,
que la ame como a un dios caído.

Si, pero eso será mañana.

Espléndido, Ramón, me parece otro gran poema de tu obra. Felicidades.

Un abrazo.
Ignacio

Ramón Carballal

Jamás defrauda, amigo Ramón Caballal. Un poema, como todos los tuyos, lleno de las figuras y metáforas que nos transportan camino de la belleza. Un gran abrazo.

José Manuel F. Febles

Pilar Morte escribió:Cada día me quedo más y más en tus poemas. Me encanta el equilibrio que has conseguido. Gracias por acercarnos a la belleza.
Besos
Pilar

Gracias a ti, Pilar, por tu lectura y amable comentario. Un beso.

Carmen López escribió:Que tres primeros versos tan buenos, tan evocadores, creo que he escuchado
el ruido del agua mientras los leía y querido saber de esa equivocación. Ramón,
te aseguro que leerte es un lujo. Felicitaciones, amigo.

Unha aperta.

Carmen

Gracias por tu lectura y amabilidad, Carmen. Unha forte aperta.

Hallie Hernández Alfaro escribió:"Alguien me dice que la noche grita, que la busque,
que la ame como a un dios caído.

Si, pero eso será mañana."

Una carga de belleza irremediable atraviesa todo el poema; y estos versos finales son maravillosos.

De pie para los aplausos, Ramón.

Abrazos y felicidad.

Gracias, Hallie, es un lujo que me leas. Un abrazo.

Marius Gabureanu escribió:Ramón me ha encantado el poema y el cierre me parece genial. Muchos abrazos y felicitaciones sinceras, amigo.

Sonido de agua en el esmalte del cristal,
ventanas desportilladas que no tienen patria.

Alguien me dice que la noche grita, que la busque,
que la ame como a un dios caído.

Si, pero eso será mañana.

Gracias, Marius, me alegra que te guste el poema. Un abrazo.

Mi padre me enseñó la historia de una equivocación.

Esa frase evocadora es el preludio de un bello poema, me gustó leerte.

Un abrazo.

Ignacio Mincholed escribió:Espléndido, Ramón, me parece otro gran poema de tu obra. Felicidades.

Un abrazo.
Ignacio

Gracias, Ignacio, por tus generosas palabras. Un abrazo.

José Manuel F. Febles escribió:Ramón Carballal

Jamás defrauda, amigo Ramón Caballal. Un poema, como todos los tuyos, lleno de las figuras y metáforas que nos transportan camino de la belleza. Un gran abrazo.

José Manuel F. Febles

Te agradezco el amable comentario, José Manuel. Un abrazo.

Mauro Colomina escribió:Mi padre me enseñó la historia de una equivocación.

Esa frase evocadora es el preludio de un bello poema, me gustó leerte.

Un abrazo.

Gracias, Mauro, por leer mi poema y comentarlo. Un abrazo.