Editorial Alaire

"No se puede escribir la palabra piel
si no es la misma que se dice cuando amás.
Cuando escribes, no se puede usar decir piel
sin más, LA MISMA PIEL menos se puede.
Esconderse piel es imposible entre algunas palabras.
Ser para los otros en un cielo donde los colores suben
siendo espasmo, torrente o sed acariciada. No se usa
piel porque puedes ser lluvia cuando lo que querías
era esconderte. Con “misma piel” nunca se te podrá
ver menos, nunca dejarás de asombrarte. No deberías
escribir “ la misma piel”, ´porque a veces así
siendo escrita, la vida se apura a delatarte,
corre por tus manos como unos ojos recién nacidos"

Macedonio, un poema introspectivo, más profundo de lo que unos pueden pensar.
Lo que realmente da valor a la palabra es lo vivido, su símbolo se agranda a través del recuerdo, se vuelve ente de lo que llevamos dentro.
Desde un sofá. El sofá aquí puede ser también piel, pero no la misma, porque no se ama, porque no es lo mismo descansar a solar o dejarse dormir en abrazos. Bueno, querido amigo, desde otro sofá y con la misma piel te digo que me ha encantado. Muchos abrazos sinceros y felicitaciones.

el sofá es una pista de prosa y una mera observación.
me da alegría que pases amigo. ya te voy a escribir

"la vida se apura a delatarte"

qué crack!!

Interesante reflexión sobre la piel, Macedonio.

Lo cierto es que puede significar muchas cosas. La palabra tiene diversas connotaciones...

Me gustó esta reflexión poética
Un beso
Ana

Esta piel se sabe entregada, querido compañero. Y esa pista de prosa es lectura maravilla para los que se arriesgan a sentir.

Abrazo y felicidad.