Editorial Alaire

Quiero andar con tus ojos y tus plantas.
Como un lucero al viento
que vaga en tus pupilas
cuando la tarde es más larga y bochornosa.
Sólo entre tus ojos,
que vuelven a ser sol,
hierba de abril
que me arrancó el sonido
de todos mis rumores más hondos,
de mis aspavientos sin ventanas
y de los más cortos manglares de mi canto.
No me dejes en la sombra, no.
Pues en tus talones
tienen los días más luces de mercurio,
más espiga y más canción,
un júbilo que sólo al rugir tu mirada
lo llena todo en su espacio sediento.
Y cuando llegue la nieve
y el otoño en mis dedos fulgure,
guarda en tus costas piadosas
una flecha esmeralda en mi nombre,
que tenga un resabio de luna
y mucho
del candor de tus caderas.

Alberto Madariaga, hermoso poema de amor, poeta. Congratulaciones!

Lirismo y elegancia mientras se acerca el amor con todos sus detalles.

un abrazo

Alberto me ha gustado sobremanera esta parte del poema


No me dejes en la sombra, no.
Pues en tus talones
tienen los días más luces de mercurio,
más espiga y más canción,
un júbilo que sólo al rugir tu mirada
lo llena todo en su espacio sediento.

Muchos abrazos y Feliz Año Nuevo.

Bellísimo, Alberto, poesía de altura llevada a tu terreno, es aquí donde te mueves como un maestro consumado, he elegido unos versos allí donde brilla el final del poema.

Y cuando llegue la nieve
y el otoño en mis dedos fulgure,
guarda en tus costas piadosas
una flecha esmeralda en mi nombre,
que tenga un resabio de luna
y mucho
del candor de tus caderas.

Un abrazo.

Solo puedo decir .. Que maravilla !!!

más espiga y más canción,
un júbilo que sólo al rugir tu mirada
lo llena todo en su espacio sediento.
Y cuando llegue la nieve
y el otoño en mis dedos fulgure,
guarda en tus costas piadosas
una flecha esmeralda en mi nombre,
que tenga un resabio de luna
y mucho
del candor de tus caderas.

Mil gracias y mil besos


Curra

Alberto Madariaga escribió:

Y cuando llegue la nieve
y el otoño en mis dedos fulgure,
guarda en tus costas piadosas
una flecha esmeralda en mi nombre,
que tenga un resabio de luna
y mucho
del candor de tus caderas.


Alberto Madariaga
(2013)
a Nadia

Precios poema que se nos quedó olvidado sin razón, Alberto.
Destado este final hermoso y te felicito poresta obra.
Un abrazo.

La identificación con el cuerpo de la amada, esa perfecta compenetración sin tiempo y sin espacio. El poema abunda en imágenes sugestivas y bellas.
Saludos.

Es un hermoso poema amigo... sensible y logrado, emociona leerte...
Te abrazo con todo mi cariño...
Nancy

Muy hermoso poema y de elegante lirismo. Me gustó leerte
Besos
Pilar

Alberto Madariaga escribió:
Quiero andar con tus ojos y tus plantas.
Como un lucero al viento
que vaga en tus pupilas
cuando la tarde es más larga y bochornosa.
Sólo entre tus ojos,
que vuelven a ser sol,
hierba de abril
que me arrancó el sonido
de todos mis rumores más hondos,
de mis aspavientos sin ventanas
y de los más cortos manglares de mi canto.
No me dejes en la sombra, no.
Pues en tus talones
tienen los días más luces de mercurio,
más espiga y más canción,
un júbilo que sólo al rugir tu mirada
lo llena todo en su espacio sediento.
Y cuando llegue la nieve
y el otoño en mis dedos fulgure,
guarda en tus costas piadosas
una flecha esmeralda en mi nombre,
que tenga un resabio de luna
y mucho
del candor de tus caderas.


Alberto Madariaga
(2013)
a Nadia

Precioso poema, Alberto, un placer leerte. ERA

Buen poema, Alberto.

Hermoso e interesante trabajo de Alberto.