Editorial Alaire

Cuarteto de cuerda


Se sientan en arco abierto para verse,
para sentir ese flujo de comunión gestual
sin que nadie ajeno al grupo
les indique cuando toca hacer los fortes.
(Son cuatro virtuosi con todo su bagaje cultural,
con sus habilidades y emociones.
También con sus defectos, diferentes).

Arranca el primer violín, seguro de sí mismo
(melodía envolvente, divino Mozart,
regalo de los siglos, apasionante…)
y enseguida le responde, también con brío, ma non troppo,
ese segundo violín que es tan difícil
(pues nadie quiere ser artista secundario).
La viola, atenta, completa los acordes
(mujer, cordura, siempre cerca)
y el violonchelo sonoro apoya a sus hermanos
(con el pie bien anclado en tierra firme).

Cuatro voces que a solas no serían
más que trozos de vida sin memoria
pero que cuando suenan conjuntadas
envidan una nueva realidad.

…

Ahora que las luces ya se apagan,
no quiero que una fácil moraleja
(inmólate en altares colectivos)
empañe la función que representa cada uno
en esta partitura de la vida.
¿Soñamos algún día ser solistas?
¿Quisimos invertir tiempo y esfuerzo?
¿Sabemos escuchar?

Quizás sólo nos quede… ser alma receptiva
que aprecie la belleza… se emocione…
y aplauda agradecida en la distancia.





Víctor F. Mallada

Pues yo aplaudo. Y emocionado. Y como no me atrevo a decir que es un poema exc..., diré que es un poema exquisito, que no es poco.
Me gusta verte por aquí y en forma, amigo Víctor.
Un abrazo
J. Manuel

Me cuento entre los aplaudidores -en general- y agradecidos a los esfuerzos del artista por poblarnos el alma de emociones. Así ha sido mi vida y así será lo que quede de ella.
Abrazos hasta esa lejanísima Filipinas.
Salud.

Yo aplaudo también Víctor, y me pongo en pie.

Un abrazo.

Y yo me sumo a este grupo de "palmeros" que han degustado lo tuyo, compañero.

Un placer venir.


Abrazos.

Víctor F. Mallada escribió:Cuarteto de cuerda


Se sientan en arco abierto para verse,
para sentir ese flujo de comunión gestual
sin que nadie ajeno al grupo
les indique cuando toca hacer los fortes.
(Son cuatro virtuosi con todo su bagaje cultural,
con sus habilidades y emociones.
También con sus defectos, diferentes).

Arranca el primer violín, seguro de sí mismo
(melodía envolvente, divino Mozart,
regalo de los siglos, apasionante…)
y enseguida le responde, también con brío, ma non troppo,
ese segundo violín que es tan difícil
(pues nadie quiere ser artista secundario).
La viola, atenta, completa los acordes
(mujer, cordura, siempre cerca)
y el violonchelo sonoro apoya a sus hermanos
(con el pie bien anclado en tierra firme).

Cuatro voces que a solas no serían
más que trozos de vida sin memoria
pero que cuando suenan conjuntadas
envidan una nueva realidad.

…

Ahora que las luces ya se apagan,
no quiero que una fácil moraleja
(inmólate en altares colectivos)
empañe la función que representa cada uno
en esta partitura de la vida.
¿Soñamos algún día ser solistas?
¿Quisimos invertir tiempo y esfuerzo?
¿Sabemos escuchar?

Quizás sólo nos quede… ser alma receptiva
que aprecie la belleza… se emocione…
y aplauda agradecida en la distancia.





Víctor F. Mallada

Un corazón apreciativo es lo más grande. Aplausos! Abrazos, ERA

El cierre es acertadísimo. Somos receptores de la gloria de los demás, pero disfrutamos la perfección de sus obras.
Un poema que te lleva sin esfuerzo y se disfruta
Besos
Pilar

Un poema, Victor doblemente musical, para abrir el año con buen ritmo,
aunque sólo sea poniendo oído y largo aplauso.

Vivan los cuatro virtuosi y tú el quinto con batuta de pluma en mano.

Un abrazo

José Manuel Sáiz escribió:Pues yo aplaudo. Y emocionado. Y como no me atrevo a decir que es un poema exc..., diré que es un poema exquisito, que no es poco.
Me gusta verte por aquí y en forma, amigo Víctor.
Un abrazo
J. Manuel

Gracias, J. Manuel, por ese apoyo constante, también a las duras.

Un abrazo, amigo.


Víctor

Julio González Alonso escribió:Me cuento entre los aplaudidores -en general- y agradecidos a los esfuerzos del artista por poblarnos el alma de emociones. Así ha sido mi vida y así será lo que quede de ella.
Abrazos hasta esa lejanísima Filipinas.
Salud.

Salud también para vosotros, Julio. Se agradecen estas palabras de apoyo. Yo también aplaudo la belleza cuando la veo.

Un abrazo, amigo.


Víctor

Precioso poema que trasmite e un primer plano la vivencia del cuarteto que se percibe vivida, conocida, próxima, y deja un sinfín de segundas lecturas e ideas que piden varias relecturas.

Amigo Víctor, un buen poema de temática bien escogida y expuesta y ritmo que no decae.

Un placer de lectura.

Ángel

Lo que distingue al poeta del escritor de versos es la mirada con que interpreta lo cotidiano. Aqui hay cuerda de poeta para rato.
Un abrazo.
Pepa

Cuerda de poeta... dice Pepa. Cuerda en tres-cuatro tesituras, pero cuerda en perfecto acorde consigo misma. Con la voz irrepetible de un poeta que sabe que la música, aunque no se entienda su significado, lo tiene, y nos eleva y nos emociona y nos transporta más allá: nos hace trascender. Como tu poesía, Víctor.
Un abrazo.
Jerónimo

Israel Liñán escribió:Yo aplaudo también Víctor, y me pongo en pie.

Un abrazo.

Gracias, Israel. Otro abrazo para ti, también de pie.


Víctor

Nésthor Olalla escribió:Y yo me sumo a este grupo de "palmeros" que han degustado lo tuyo, compañero.

Un placer venir.


Abrazos.

Gracias, compañero, por este "feedback" hermoso. Un abrazo de Reyes, desde oriente.


Víctor