Editorial Alaire

Pez de fuego ardiendo en las alturas,
cola de humo girando en el crepúsculo,
siete vientos trae tu lengua,
cuatro escamas llevan tu dirección.

Camaleón fugaz,
metamorfosis permanente,
juguete pomposo de los niños,
a veces animales, a veces tu y yo,
a veces camaleón.

Ancla de los cielos,
barco del universo,
inmensa marea donde duermen mis sueños,
gaviota de espuma que picotea el sereno.

Nube solitaria nube,
pez ardiente, camaleón fugaz,
ancla del vacío,
corriente infinita de aletas nocturnas,
guía mi silencio donde desaparecen tus galopes,
lleva mi alma donde comienzan
a rugir los huracanes.

No merece este poema estar a cero comentarios.
Me gustó tu inspiración, la que te traen los dibujos de la nube
que cambia a cada instante de peor a mejor y viceversa
en una metamorfosis continua.

Un abrazo y Feliz Año.

Precioso trabajo, Antonio.

Sube para deleite de todos.

Hermoso poema de Antonio.

Antonio,

me ha gustado mucho, amigo. Desde el título dejas claro la intención del texto: voy a escribir metáforas, sobre una nube. Este acercamiento al lector al principio es todo un detalle, uno no se siente ni mucho menos llevado de la mano como un tonto, sino, de alguna manera respetado. Vas a leer esto, a ver si te gusta. Me quedo con la idea.

En cuanto a las metáforas en sí, me ha gustado mucho la del camaleón fugaz, me parece realmente buena.

Un abrazo, amigo.

en ese juego simple y directo, habiendo avisado y a la vista de todos, dice más de lo que dice y ese es el juego. no solo son las metáforas sino que es confiar en las metáforas, confiarse a las nubes.
abrazo

Hermoso poema cuajado con imágenes logradas. Un placer leerte
Besos
Pilar

Ahí donde rugen los huracanes pusiste un vendaval de metáfora y
aliento poético.

un abrazo