Desahuciados

[Ramón Carballal]

Un poema magnífico. Te doy la bienvenida a esta reentrada al foro. Un abrazo.

[E. R. Aristy]

Después de tantos años apartado del mundo de los foros, hoy vuelvo sólo para declarar que sigo vivo. Desde aquí os abrazo a todos, a los que me conocéis y a los que no. Y os dejo este poemilla que dedico a vuestra inolvidable amistad, pretérita y actual, y a la que pueda surgir, siempre acogida con aprecio.


DESAHUCIADOS


Salieron por la puerta los fruteros enmohecidos
y los gatos reumáticos con rabos de jazmines.
Salieron las canciones de voz aflautada
y las risas diluidas de navidades remotas.
Salieron los dolores, los vómitos, las angustias,
acompañados todos por el fósforo del recuerdo.
Los muebles de la alcoba formaron una pila
sobre la acera sucia de los barros antiguos
y una medalla de plata quedó perdida en un rincón.
Salieron las mantas húmedas de sudor agrio
y las sábanas zurcidas con hilo de esperanza
y los sillones tapizados con pétalos secos
y una mesa muy larga que alimentó el olvido.
Salieron por la puerta los dos ancianos corvos
y anduvieron despacio por las calles
sin saber que acababan de morir.

Que tarde esta que estoy disfrutando aqui en Alire! Tu poema es excelso. Nos lleva por los objetos, por las cosas ( cuyo significado es atribuido y es personal ), nos llevas a las calles ( que son cmo esa puerta de potente simbolismo) hasta ese "sin saber" donde mistificas la vida y la muerte. Mi admiracion y respetos Jeronimo. E. R. Aristy

[José Manuel F. Febles]

Mi muy querido amigo Jerónimo, inmensa la alegría de saberte de nuevo en este foro. Has escrito un poema excepcional, algo así como la confesión de que la vida está en el arte de morir sin saberlo. El mismo vivir, pasar de un mundo a otro. Tu calidad poética y humana, queda al descubierto.

Te envío un gran abrazo POETA.

José Manuel F. Febles

[Jerónimo Muñoz]

El final, me erizó la piel, amigo mío...
Un gusto conocerte y conocer tu vivo versar.
Un abrazo.

Para mí también ha sido un gusto conocerte y recibo tu amistad con alegría.
Gracias por tus amables elogios.
Un abrazo.
Jerónimo

[Jerónimo Muñoz]

Excepcional, triste, terrible, Jerónimo...

Un fuerte abrazo
y
Enhorabuena
Ana

Tus tres adjetivos encumbran mi poema más alto de lo que merece.
Te lo agradezco mucho.
Besos.
Jerónimo

[Jerónimo Muñoz]

El poema es inmenso, casi tanto como la alegría por tu regreso. Un gusto leerte de nuevo.
Un abrazo.
Pepa

Pepa:
El poeta se alegra de ser leído, pero si te produce más alegría mi regreso que mi poema, entonces mi júbilo es mucho mayor. Contar con tu aprecio es el mejor de los premios.
Gracias. Desde que me fui de los foros no he encontrado palabras tan entrañables como estas.
Besos.
Jerónimo

[jorge muñoz]

Jerónimo. Un poema duro, casi como un realismo mágico, con un exquisito e inesperado final. Un gusto de lectura y re-bienvenido a este foro. Es bueno leer poesía de calidad.

[Jerónimo Muñoz]

Salieron por la puerta los fruteros enmohecidos
y los gatos reumáticos con rabos de jazmines.
Salieron las canciones de voz aflautada
y las risas diluidas de navidades remotas.
Salieron los dolores, los vómitos, las angustias,
acompañados todos por el fósforo del recuerdo.
Los muebles de la alcoba formaron una pila
sobre la acera sucia de los barros antiguos
y una medalla de plata quedó perdida en un rincón.
Salieron las mantas húmedas de sudor agrio
y las sábanas zurcidas con hilo de esperanza
y los sillones tapizados con pétalos secos
y una mesa muy larga que alimentó el olvido.
Salieron por la puerta los dos ancianos corvos
y anduvieron despacio por las calles
sin saber que acababan de morir.

Bienvenido, amigo Jerónimo, o quizá bien hallado porque seguramente nunca te fuiste muy lejos.
Me gusta verte por aquí, es gratificante, enriquecedor. Además, te he añorado; era inevitable con tantas y tan interesantes conversaciones que mantuvimos. Al despertar, el café con Blanca; acto seguido, nuestros larguísimos diálogos sobre poesía, sí, pero también al albur de muchos asuntos que nos parecían vitales. Se fue Blanca; tú no aparecías y me quedé bastante tocado. Dos pérdidas muy grandes. Menos mal que Pilar y Ferreiro siempre estuvieron, de lo contrario, Alaire no sería lo que es.
En fin, has llegado en un momento muy propicio para que retomemos ciertas costumbres.

En cuanto a tu poema, es un incendio provocado. El tiempo no lo regala ningún dios; urge la llama purificadora. De la quema, se ha salvado una simiente de futuro, pero se trata de un pretérito en su parte más hostil. Quizá si se comprende la curvatura, la muerte que aún puede pensar…

De la forma, me encantará comentar ciertos aspectos que ahora me tienen ocupado. Verso simple o verso compuesto, la dinámica silenciosa…

Ha sido un placer leerte. Felicidades por el poema, es hermoso, trufado de elementos que hablan de oficio versal y habilidad literaria y, desde luego, puede ser una obra con una importancia muy reseñable.

En fin, no sé decirte más, sino que recuerdo una historia de pepitos grillos o similares en la que a veces se dan a la bebida del error, como una esponja que se nutre de impotencia, lágrima del espirituoso perplejo, irremediables coqueras, temerarios de cristal, sed infinita de su propia esencia.
Y es que tan solo conocen dos maneras de juzgarse, reírse de la suerte o llorarse por lo bajo, esperando un destello de calma aunque sea diminuto y lejano, que aparezca de forma que les alegre la vida, como el signo de paz de una guerra perdida, al abrigo del mundo donde habitan los débiles.

Ay, vivir. El tacto de la vida a veces les ha engañado, por más que hubieran decidido sentir a flor de piel; pero, sí, todavía palpan un bullicio de cosas por sentir, quizá sobrevivientes de versos y lisonjas que aún siguen intactos.

A veces, les da por percibir las sensaciones de un castillo de arena en la playa del sino; edificios forjados de miedos ancestrales a mostrarse sumisos con la realidad del hombre de un carácter de mustio mineral o ágil y bullicioso soslayo; pero siempre, siempre quebradizo.
Y, sí, tal vez deberían pensar que la vida no es parca, quizá el armazón de sueños sigue ahí.

Es por ello que ahora se sienten como un árbol que sueña en el ciclo vegetativo de la mano extendida, todavía crecer en la maduración de una entraña que les parece la huerta donde nacen los frutos que alimentan el ansia de saber. Mas, se preguntan si ahora aún están a tiempo de sentir un lenguaje vital, o si todo cuanto queda es sinónimo de yerto.

Un fuerte abrazo.

No, Rafel: no fui muy lejos. En realidad, sólo di un paseo por mi barrio.
Me dices unas frases muy acogedoras que te agradezco. No merezco tanto. Ciertamente, no.
¡Qué razón llevas cuando hablas de aquellos “asuntos que nos parecían vitales”! Sí. El tiempo pasa, la vida se oscurece a nuestro alrededor (al menos, a mi alrededor), pero crece en nosotros una luz que nos hace vislumbrar, cada vez con más nitidez, los perfiles surrealistas de este mundo de la poesía, falaz y sublime a la vez. Ahora veo claramente la superflua vanidad que impregna todas las tentativas de los que quieren encontrar un sitio en la gloria. Durante mi paseo por el barrio, he encontrado fantasías, ficciones, simulacros, jactancias y mucha, mucha falsedad. He publicado seis números de una revista como la que yo quería (¿recuerdas?), solo de poesía. No ha servido para nada, aunque muchos me la hayan elogiado. Para nada. He publicado tres libros que, entre los tres, no han conseguido ni la mitad de las lecturas que este poemita que he insertado aquí. Tengo firmado un contrato para publicar otro, pero no, no lo publicaré.
Entonces, cuando, como el hijo pródigo, recordé mi antiguo hogar, he vuelto a él, y me siento feliz por lo bien que he sido acogido.
Me dices muchas cosas, todas barnizadas de poesía. Es casi prosa poética tu mensaje. Veo que sigues tan creativo y tan fecundo como antes, si no más. Veo que el foro está lleno de estupendos poetas que aman, de verdad, la poesía. Te felicito por ello y por todo.
En fin: gracias por tu acogida y por tu bonhomía.
Un abrazo.
Jerónimo

[Jerónimo Muñoz]

Un poema duro y triste, pero necesario. Lamentablemente, lo que para algunos sólo es negocio, dinero y poder, para otros es toda una vida. Excelente entrega.

Un abrazo.

Sí, Antonio. "Dura lex sed lex". Desgraciadamente, la ley se ha hecho con la cabeza y no se ha tenido para nada en cuenta el corazón.
Gracias por tu cordial comentario.
Un abrazo.
Jerónimo

[Jerónimo Muñoz]

Querido amigo! Poeta de sensibilidad extrema.
Me alegra mucho leerte otra vez, y "leerte" cobra un sentido unitario cuando se habla de ti, pues calidad poética y humana se toman de la mano para recorrer cada palabra.

El Poema es expansivo, y uno puede ver, poco a poco, cómo se apaga la esperanza, cómo la propia vida se desahucia a si misma, más allá de hogares y destinos.

Un fuerte abrazo, Poeta.

Me da mucha alegría encontrarte otra vez. Luis. En realidad, nunca te fuiste de mi memoria.
Te agradezco mucho esas expresiones elogiosas que, más que de la realidad, nacen de tu afecto. Sabes que este afecto es mutuo. Y sabes también de mi inquebrantable admiración hacia ti.

Recibe tú también un fuerte abrazo.

[Jerónimo Muñoz]

Un poema magnífico. Te doy la bienvenida a esta reentrada al foro. Un abrazo.

Gracias, Ramón, por tu elogio y por tu bienvenida. Estar entre amigos es la mejor forma de abrirse a la inspiración y, sobre todo, a la fraternidad.
Un abrazo.

[Jerónimo Muñoz]

Después de tantos años apartado del mundo de los foros, hoy vuelvo sólo para declarar que sigo vivo. Desde aquí os abrazo a todos, a los que me conocéis y a los que no. Y os dejo este poemilla que dedico a vuestra inolvidable amistad, pretérita y actual, y a la que pueda surgir, siempre acogida con aprecio.


DESAHUCIADOS


Salieron por la puerta los fruteros enmohecidos
y los gatos reumáticos con rabos de jazmines.
Salieron las canciones de voz aflautada
y las risas diluidas de navidades remotas.
Salieron los dolores, los vómitos, las angustias,
acompañados todos por el fósforo del recuerdo.
Los muebles de la alcoba formaron una pila
sobre la acera sucia de los barros antiguos
y una medalla de plata quedó perdida en un rincón.
Salieron las mantas húmedas de sudor agrio
y las sábanas zurcidas con hilo de esperanza
y los sillones tapizados con pétalos secos
y una mesa muy larga que alimentó el olvido.
Salieron por la puerta los dos ancianos corvos
y anduvieron despacio por las calles
sin saber que acababan de morir.

Que tarde esta que estoy disfrutando aqui en Alire! Tu poema es excelso. Nos lleva por los objetos, por las cosas ( cuyo significado es atribuido y es personal ), nos llevas a las calles ( que son cmo esa puerta de potente simbolismo) hasta ese "sin saber" donde mistificas la vida y la muerte. Mi admiracion y respetos Jeronimo. E. R. Aristy

Si logro que alguien disfrute con siquiera un verso mío. yo también disfruto. Y más si, como es el caso, el comentario proviene de alguien como tú, que te explayas en consideraciones poéticas que revelan una total conexión con el espíritu del poema.
Gracias, muy sinceramente.
Un abrazo.
Jerónimo

[Jerónimo Muñoz]

Mi muy querido amigo Jerónimo, inmensa la alegría de saberte de nuevo en este foro. Has escrito un poema excepcional, algo así como la confesión de que la vida está en el arte de morir sin saberlo. El mismo vivir, pasar de un mundo a otro. Tu calidad poética y humana, queda al descubierto.

Te envío un gran abrazo POETA.

José Manuel F. Febles

Muy querido, sí. A pesar de la distancia, del tiempo, de las vicisitudes de la vida, sé que soy muy querido por ti, como tú lo eres por mí. Te retengo en mi memoria, siempre taciturna, y no olvido los poemas de tus libros, tan excelentes, como aquel "Ese inacabado mundo del olvido", al que me hiciste el honor de dejarme escribir su prólogo. Tú sí eres poeta con mayúsculas y estos elogios que me haces los recibo como una lluvia en plena temporada de sequía.
Gracias, una vez más, José Manuel.
Un fuerte abrazo.
Jerónimo

[Felipe Fuentes García]

Un saludo afectuoso, Jerónimo. Ha sido una alegría volver a leer tu poesía, compañero. Me ha gustado mucho tu poema, pletórico de hallazgos y singular y personal en su voz poética, que es la tuya, genuina y reconocible. Mi felicitación y aprecio. Un abrazo. Felipe.

[Jerónimo Muñoz]

Es una gratísima noticia, tenerte de nuevo entre nosotros, querido amigo y miembro fundador de los foros Alaire, uno de los sitios de poesía de internet que más éxito está alcanzando por la incuestinable calidad de muchos de los poetas que aquí escriben.

El poema es un magnífica muestra de la sutil e imaginativa creatividad que te caracteriza. Hay pocos poetas que terminen sus poemas de manera tan magnífica como tú.

Un fuerte abrazo.

Querido J. J.:
Me advierte un buen amigo que me he saltado tu respuesta y la de Concha. Esto no es más que una señal de que los años pasan y no sin consecuencias. Perdona.
Pues, sí, J. J.: he vuelto a los foros o, mejor, sólo a este foro, que es donde quedaron mis mejores amigos. He vuelto como el "Hijo Pródigo", sin pretender ser tratado más que como al último de los miembros. Como le digo a Rafel, he dado vueltas por ahí, tú lo sabes, y ahora me he cansado de deambular por ese mundo donde subir un solo peldaño exige una falsedad activa que soy incapaz de adoptar. Tardé en darme cuenta pero ahora ya sé.
Te agradezco enormemente (¿cómo no?) tu comentario y tu acogida. Ya sabes que sigo tu blog y que admiro tu poesía. También a ti, como persona.
Un abrazo perenne.
Jerónimo