Editorial Alaire

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legiones completas emigrarán a las orillas tibias
donde la tierra se despedaza
indiferente a la miseria
que consume el aire y el miedo.



Recibe mis felicitaciones, Martín, por este poema donde encuentras expresiones muy bellas e impactantes. Me alegra poder abrir la lista de comentarios.
Salud.

Es genial elprincipio y tu esti(l)o, siempre.
Es un placer leerte.
Sí, me gussta. Me lo quedo para mi
Un abrazo

Julio: Agradezco tu visita y comentario al texto, de paso te felicito por el Premio de Poesía, totalmente merecido, se nota, de lejos, tu sabiduría y amor hacia la literatura.

Mis saludos.

Martín Desormeaux.-

Hola, Paloma: Gracias por pasar ycomentar. Lo del esti(l)o, no sé, mi estilo es malo y está haciendo frío, así que de estío, poco :S.

Saludits

Martín Desormeaux.-

Un poema de corte amoroso, Martín, que se desarrolla en un ambiente muy ambiguo, en ese misterio que tú siempre das a tus versos, pero del que se extrae una profundidad que quiere incidir en el lector. Yo creo que lo más interesante de tus textos son las diversas caras que asocias al tema amoroso, eslabón central por el que pasan toda clase circunstancias, asociadas o no en la mente del lector, pero en tus versos confluyen y obligan la mirada a detenerse en ello, eso hace tus textos originales y muy personales:


galaxias arbóreas rodean los límites despoblados
que alguna vez nos pertenecieron,

legiones completas emigrarán a las orillas tibias
donde la tierra se despedaza
indiferente a la miseria
que consume el aire y el miedo.

No siempre se puede tener un sello que nos diferencie, pero tú lo estás consiguiendo, gracias a tu trabajo, y creo que debe valorarse mucho más de lo que algunas veces se valora.

Un abrazo

Sara

Eres genial, me gusta muchomuy tu poesía.

Saludits

Dejas los sentidos impactados con tan grandes imágenes que has proyectado.
Me gusta el manejo que tienes del lenguaje, te felicito, un abrazo.

Martín Desormeaux escribió:
legiones completas emigrarán a las orillas tibias
donde la tierra se despedaza
indiferente a la miseria
que consume el aire y el miedo.

el tiempo suele hacerse humo entre las manos de quien nos acompaña martin, y en tu poema, se hace humo cuando se lee de principio al instante que se descubre que ya solo queda el punto final. gracias por esa mezcla de lirica y deseo.

Gracias, Sara, por tus palabras y constante lectura hacia lo que escribo.

Mis saludos.


Martín Desormeaux.-

Alondra, agradezco tus palabras y tu visita.

Saludits.


Martín Desormeaux.-

Muchas gracias, Azalea, por tus palabras hacia mi texto, y por la lectura.

Saludos para ti.


Martín Desormeaux.-

Martín Desormeaux escribió:Muéreme en los anillos de la noche,
el temblor es un minuto exacto
donde tu voz acontece
a través de mis huesos
y el mar tuerce su ira
contra las máquinas del hombre,
para que todo
o mucho
sea un espejismo derramado
dentro de las heridas del océano.

El horizonte tiembla frente a tus ojos,

galaxias arbóreas rodean los límites despoblados
que alguna vez nos pertenecieron,

legiones completas emigrarán a las orillas tibias
donde la tierra se despedaza
indiferente a la miseria
que consume el aire y el miedo.

Dime esta noche
el significado del duelo silencioso
que arde en tu piel,
mañana nos convertiremos
en pasado, hundidos en el fondo
de una botella
recién lanzada hacia el infinito,

el tiempo se hace humo
entre tus manos.






Algarrobo, 2008

Muéreme en los anillos de la noche

Un poema de una sublimidad elevada, flotando en la nada que somos porque tememos perder lo unico que conocemos; la sensualidad. Un poema que delimita a las muertes, y en realidad habla del limite de nuestra s percepciones, sugiere que hay un continum al traspasar el litoral. Me ha maravillado tu arte poetica. Tu talento crece a ser un arbol perenne, infinito. Te felicito estimado Martin.

Eduardo: Es un gusto tener tu visita en este espacio. Agradezco tus palabras.

Mis saludos.

Martín Desormeaux.-

No sé por dónde comenzar para agradecer todas tus palabas, ERA, sólo manifestar mi alegría de que te haya gustado el texto.

Un saludo y gracias.

Martín Desormeaux.-