Madre un día me diste tu la vida,
un día mediste tú el ser,
entre tus brazos madre
un día yo me encontré.
Me recibiste con mucha ilusión,
llena de amor,
aún después de causarte
sudor y dolor.
Ahora me toca a mí madre,
atenderte y cuidarte
darte un poco , de lo mucho
que tú ,te esforzaste.
Como no quererte madre mía,
si me has dado tú ,
lo mas bello que es la vida,
como no quererte madre mía,
si eres ,
como el dulce tocar
de una melodía.
Como me miras hoy
te miraste,
como te miro estaré,
algún día mis hijos ,
estarán también entre mis brazos
con amor y alegría como tú lo haces
al igual por siempre esperaré.
Como no quererte madre mía
si eres lo mejor que me ha pasado
cuando un día me diste tú la vida.
Eres fuente de calor e inspiración
de madre abnegada,
llena de valor y amor.
A veces los hijos somos tan ingratos
se nos olvida quien nos dio el ser,
los abandonamos a su suerte
a aún sabiendo que pueden perecer.
No somos nada en el ruedo,
en el ruedo,
que nos toca recorrer,
entre tus brazos madre,
encontramos paz, rincón, voz
y consuelo en cada atardecer.
Como no quererte madre mía
si lo has ganado a pulso
con tus desvelos y agonías.
como no quererte madre mía,
si eres dicha y armonía,
eres la luz de mis ojos
y mi guía.
otro otoño más
queriéndome mecer
en la cuna de la vida,
tratándome de proteger.
Y como no quererte entonces
madre mía,
si eres lo mejor que me ha pasado
aun tenerte aquí en la vida.
AUTOR: IRMA PERIBAN VILLA...MEXICO
