EL REGRESO
Publicado: Vie, 15 Nov 2013 17:56
Volvió por donde el sol
aún recortaba los pasados de su nombre,
y la buscó en cada letra
del páramo que nunca germinó sobre sus pasos,
y ya no estaba allí.
Desnudo como el hambre,
lloró la lejanía que antaño quiso hablarle de caricias,
y el sonido de la tarde
le ignoró por el camino que llevaba a las estrellas.
Dejó encendido el lamento de la ausencia,
y volvió sobre las huellas dolientes del abandono
hacia los valles húmedos de la memoria,
y así,
con la historia escrita en su equipaje,
se fue
con el paisaje gris del horizonte
clavado en su figura y la locura a cuestas,
con las promesas rotas
y la boca cargada de vacío,
allá,
donde el gemido templara su lecho
vestido de poros baratos y besos de saldo,
y se durmió colgado de una luna sin nombre
pegada en un cielo abandonado.
Volvió por donde el sol
pintaba de ocre los olivos,
y la olvidó en cada letra…
y se murió en cada olvido.
aún recortaba los pasados de su nombre,
y la buscó en cada letra
del páramo que nunca germinó sobre sus pasos,
y ya no estaba allí.
Desnudo como el hambre,
lloró la lejanía que antaño quiso hablarle de caricias,
y el sonido de la tarde
le ignoró por el camino que llevaba a las estrellas.
Dejó encendido el lamento de la ausencia,
y volvió sobre las huellas dolientes del abandono
hacia los valles húmedos de la memoria,
y así,
con la historia escrita en su equipaje,
se fue
con el paisaje gris del horizonte
clavado en su figura y la locura a cuestas,
con las promesas rotas
y la boca cargada de vacío,
allá,
donde el gemido templara su lecho
vestido de poros baratos y besos de saldo,
y se durmió colgado de una luna sin nombre
pegada en un cielo abandonado.
Volvió por donde el sol
pintaba de ocre los olivos,
y la olvidó en cada letra…
y se murió en cada olvido.