Editorial Alaire

Una mentira hermosa


Una mentira hermosa
y una verdad hiriente
coincidieron un día en la misma puerta.

¿Entramos, compañera?
Sólo si nos invitan.
Pasa tú primero que vienes engalanada.

¿Porqué me odian tanto,
se preguntó la una,
si yo sólo aparezco cuando me llaman?

Y la otra le dijo,
muy sonriente: yo soy
esa mentira hermosa que todos creen.
La que, con sus caricias,
adormece los ánimos
de aquellos que persisten en sus quimeras.

Tú, en cambio, sólo eres
una verdad hiriente
que nadie quiere abrazar cuando te acercas.

Y entraron en la cárcel
del ombligo del mundo
donde todos los miedos, las ansiedades
y las expectativas aún sin definir
desfilaban al ritmo de esos tacones
de pasarela estrecha,
miradas en escorzo y envidias a medio mascullar.

¿Qué es la vida, me dices,
si en cada paso
vivimos y morimos poquito a poco?

¿Una mentira hermosa?
¿Una verdad hiriente?
¿O son las dos los mismo?

… ...

Amigo. Si lo piensas.., !De ti depende!


Víctor F. Mallada

Hermosa fábula poética. Ingenio, inteligencia, bien decir, excelente planteo argumental. Sólo me resta felicitarte.

Un abrazo grande.
Óscar

Una forma inteligente de hacernos comprender dos formas de la vida.
Aplaudo tu acierto
Besos
Pilar

Una entrega muy original, con ese estilo agudo, inteligente y levemente irónico que te caracteriza.

Me quedo con ese final

¿Qué es la vida, me dices,
si en cada paso
vivimos y morimos poquito a poco?

Por cierto, se te fue la tecla en ese "Qué es", que lo has puesto todo junto.

Un abrazo, queriod amigo.

Qué es un poeta sin su poesía...
Inteligente y a la vez, reflexiva tesitura nos brindas.
Un fuerte abrazo, Poeta.

Cercanos e inteligentes versos que tienen ya eco hacia el infinito. Siempre es un acierto leerte, Víctor.
Un abrazo grande, poeta

¿Una mentira hermosa?
¿Una verdad hiriente?
¿O son las dos los mismo?

Me ha gustado mucho, Víctor.

Un abrazo.

Óscar Distéfano escribió:Hermosa fábula poética. Ingenio, inteligencia, bien decir, excelente plateo argumental. Sólo me resta felicitarte.

Un abrazo grande.
Óscar

Gracias, Oscar, por romper el hielo, por dejar tu huella y por ese abrazo grande que acepto de buen grado.

Víctor

Pilar Morte escribió:Una forma inteligente de hacernos comprender dos formas de la vida.
Aplaudo tu acierto
Besos
Pilar

Gracias, Pilar. Las cosas compartidas saben siempre muchísimo mejor.

Un abrazo,

Víctor

J. J. M. Ferreiro escribió:Una entrega muy original, con ese estilo agudo, inteligente y levemente irónico que te caracteriza.

Me quedo con ese final

¿Qué es la vida, me dices,
si en cada paso
vivimos y morimos poquito a poco?

Por cierto, se te fue la tecla en ese "Qué es", que lo has puesto todo junto.

Un abrazo, queriod amigo.

Gracias, Ferreiro, por el comentario tan generoso y por la corrección tan oportuna.

Ambas ayudan a mejorar poquito a poco.

Un abrazo,

Víctor

Así es, amigo Víctor, nada es verdad ni mentira, que depende del color, del cristal con que se mira, que decía Campoamor. Y de nosotros depende de dejar pasar a nuestra casa la mentira hermosa o la verdad hiriente. Yo soy partidario de dejar pasar la segunda, para saber, al menos, con qué me enfrento.

¿El poema? Ha sido un placer degustarlo por la verdad que encierra y por el modo en que nos lo entregas.

Un abrazo.

Quinteño de Greda escribió:Qué es un poeta sin su poesía...
Inteligente y a la vez, reflexiva tesitura nos brindas.
Un fuerte abrazo, Poeta.

Gracias, Quinteño. Viniendo de ti, son unas palabras halagadoras.

Un abrazo, amigo.

Víctor

Liz Barrio. escribió:Cercanos e inteligentes versos que tienen ya eco hacia el infinito. Siempre es un acierto leerte, Víctor.
Un abrazo grande, poeta

Otro abrazo grande para ti, Liz. Humildemente, gracias.

Víctor

Bien dices que cada cual elige lo que prefiere, si que le regalen la oreja o que le digan las verdades del barquero. Yo, de momento, te digo, con el corazón en la mano, que me ha gustado mucho el poema.
Un abrazo.
Pepa

CELIA PUERTA escribió:¿Una mentira hermosa?
¿Una verdad hiriente?
¿O son las dos los mismo?

Me ha gustado mucho, Víctor.

Un abrazo.

Gracias, Celia, por decirlo y mantener la llama, si quiera por un ratito más.

Un abrazo,

Víctor