Editorial Alaire

Despojarme de mi abrigo es difícil cuestión.
Hoy he averiguado el nombre verdadero de la vida,
Y la decepción me aguarda fumándose un colibrí.
Además convalezco junto al café que había apurado,
Que derramé sin pretenderlo y cuyo hedor me trastorna.
Un café de irrecuperables, agrietados momentos.
Por cada invierno numero un segundo y mi letargo,
Antes de embarcarme en pugnas fronterizas,
Abarca un viento de gruñidos que numero cual segundos.
Hoy hay labios de cera que me analizan en los paseos,
Juntándose y repeliéndose con brumosas intenciones,
Irrumpiendo en la atmósfera de viandantes.
Ninguna experiencia confiesa por qué se suicida la verdad,
Por qué tropieza en filamentos donde la espía el desengaño.
Ninguna experiencia explica el último lamento de un cisne.
Hoy, con migajas de suerte, despejaré un poco los crepúsculos,
Tal vez descubra el camuflaje del infinito y aprenda a utilizarlo.
Así huiría de mi crisálida, se extinguirían los horizontes,
Adiós al destino encrucijado e incontrolable.
Hoy desatendí algún resquicio natural de mis sueños,
Lo abandoné en un abismo de crudeza.
Reconozco que no encuentro hogar ninguno,
Que los países son celdas de percepción social,
Y oasis de intelectos se inundan de corrupción.
¿Acaso el aleteo de una sonrisa no es mejor cubil?
Esa cascada de amaneceres resguarda mil conocimientos,
Mil sabidurías inexplicables.
El asunto es asumirlas y aferrarlas,
Adquiriendo el verdadero nombre de la vida.
Pero, ¿cuál es en realidad?




(Reflexión surrealista de un viandante más)

Reflexiones del hombre ahogado por la vorágine de un mundo sombrío. Un poema intenso, de excelentes imágenes. Mis felicitaciones. Bienvenido a este Foro. Saludos.

En efecto, reflexiones de un hombre sensible y atrapado, cegado por los ángulos de su vida que le impiden ver más allá, completamente confuso.
Con esa intención creé el poema. Gracias por la lectura emocional.

Creo que es lo primero que te leo. Me parece que tus versos tienen una gran fuerza y originalidad en las imágenes. Nos perdemos muchas veces entre las paredes que fabricamos para protegernos. Bienvenido y que la estancia te sea grata.
Un abrazo.
Pepa

Es precisamente otra intención de muchos de mis poemas: perderme entre las paredes que construyo estéticamente, rellenándolas con pintarrajos de sustancia aquí y allí y allá. Multi-interpretación donde la haya. Gracias por la lectura, un abrazo.

Espléndido, profundo e intenso poema. Me ha encantado.

Seas bienvenido. Un abrazo.

Hola Rurik.
Unas reflexiones en forma de poema o un poema hecho de reflexiones. Lo mismo da. Pero me han parecido profundas, acertadas y con buenas imágenes. Un gusto leerte y bienvenido al foro. Un abrazo.
Mario.

Creo que ya te había dado la bienvenida, pero no me importa volverlo a hacer en este poema.
¡Ah, no le des más vueltas, el verdadero nombre de la vida.... ¿qué cual es?

Sigue viviendo... VIDA...

Mis saludos mediterráneos.

La intensidad del poema reside en esa incógnita. Seguir viviendo, sí... pero el nombre de la vida es desconocido y relativo para cada uno... ¿Cuál será, cuál será? O quizá no haya ninguno y sólo necesitemos apreciar lo que nos rodea. Agradezco vuestros comentarios sobre este pequeño poema hecho de reflexiones desordenadas. ¡Salud!

Rürik Singajik escribió:

Despojarme de mi abrigo es difícil cuestión.
Hoy he averiguado el nombre verdadero de la vida,
Y la decepción me aguarda fumándose un colibrí.
Además convalezco junto al café que había apurado,
Que derramé sin pretenderlo y cuyo hedor me trastorna.
Un café de irrecuperables, agrietados momentos.
Por cada invierno numero un segundo y mi letargo,
Antes de embarcarme en pugnas fronterizas,
Abarca un viento de gruñidos que numero cual segundos.
Hoy hay labios de cera que me analizan en los paseos,
Juntándose y repeliéndose con brumosas intenciones,
Irrumpiendo en la atmósfera de viandantes.
Ninguna experiencia confiesa por qué se suicida la verdad,
Por qué tropieza en filamentos donde la espía el desengaño.
Ninguna experiencia explica el último lamento de un cisne.
Hoy, con migajas de suerte, despejaré un poco los crepúsculos,
Tal vez descubra el camuflaje del infinito y aprenda a utilizarlo.
Así huiría de mi crisálida, se extinguirían los horizontes,
Adiós al destino encrucijado e incontrolable.
Hoy desatendí algún resquicio natural de mis sueños,
Lo abandoné en un abismo de crudeza.
Reconozco que no encuentro hogar ninguno,
Que los países son celdas de percepción social,
Y oasis de intelectos se inundan de corrupción.
¿Acaso el aleteo de una sonrisa no es mejor cubil?
Esa cascada de amaneceres resguarda mil conocimientos,
Mil sabidurías inexplicables.
El asunto es asumirlas y aferrarlas,
Adquiriendo el verdadero nombre de la vida.
Pero, ¿cuál es en realidad?




(Reflexión surrealista de un viandante más)

Me gusta mucho tu originalidad y tu reflexión Rurik. Pues si cada uno de nosotros asume su role, serian muchos nombres. Un gusto leerte, Abrazos, ERA

Rürik Singajik escribió:

Despojarme de mi abrigo es difícil cuestión.
Hoy he averiguado el nombre verdadero de la vida,
Y la decepción me aguarda fumándose un colibrí.
Además convalezco junto al café que había apurado,
Que derramé sin pretenderlo y cuyo hedor me trastorna.
Un café de irrecuperables, agrietados momentos.
Por cada invierno numero un segundo y mi letargo,
Antes de embarcarme en pugnas fronterizas,
Abarca un viento de gruñidos que numero cual segundos.
Hoy hay labios de cera que me analizan en los paseos,
Juntándose y repeliéndose con brumosas intenciones,
Irrumpiendo en la atmósfera de viandantes.
Ninguna experiencia confiesa por qué se suicida la verdad,
Por qué tropieza en filamentos donde la espía el desengaño.
Ninguna experiencia explica el último lamento de un cisne.
Hoy, con migajas de suerte, despejaré un poco los crepúsculos,
Tal vez descubra el camuflaje del infinito y aprenda a utilizarlo.
Así huiría de mi crisálida, se extinguirían los horizontes,
Adiós al destino encrucijado e incontrolable.
Hoy desatendí algún resquicio natural de mis sueños,
Lo abandoné en un abismo de crudeza.
Reconozco que no encuentro hogar ninguno,
Que los países son celdas de percepción social,
Y oasis de intelectos se inundan de corrupción.
¿Acaso el aleteo de una sonrisa no es mejor cubil?
Esa cascada de amaneceres resguarda mil conocimientos,
Mil sabidurías inexplicables.
El asunto es asumirlas y aferrarlas,
Adquiriendo el verdadero nombre de la vida.
Pero, ¿cuál es en realidad?




(Reflexión surrealista de un viandante más)

Espléndido poema, Rürik, que me sumerge en esa "reflexión surrealista" de tu propuesta, que me arrastra con su verso sostenido y firme hacia una tensión emotiva, hacia un "estado" emocional de múltiples caras. Me parece un gran poema, de equilibrado y libérrimo verso y que, mediante la palabra poética, edifica una realidad que -más allá de la propuesta o sugerida- cada lector completa o crea. Me ha gustado mucho leerte, amigo.

Recibe un abrazo.
Felipe.

E. R. Aristy, gracias por dedicarle unos momentos, ERA. Valoro tu lectura y tu breve comentario y me adula el hecho de que te haya gustado. ¡Salud!

Felipe Fuentes García, gracias por denominarlo "espléndido", me ha confortado tu aclaración del poema y tu interpretación personal. Para mí, un pilar-eje de la poesía (y también el contrario, cómo no) es la capacidad que posee para ejercer y aportar varias ideas, sensaciones y emociones con las mismas palabras, semejante a un cuadro y su espectador. ¡Gracias por la lectura, salud!