La Editorial Alaire, auspiciada por la Academia de Poesía Alaire, pone gratuitamente a disposición de sus foristas registrados, varios foros de poesía, prosa literaria, debates…, para que puedan publicar sus obras e interactuar entre ellos, así como, la tienda de libros donde se muestran las publicaciones, tanto en papel como en formato digital, estos mediante descarga gratuita. La razón de ser de nuestros foros se centra en promocionar la poesía, mediante las obras de los autores que participan en la plataforma de la Academia de Poesía Alaire. La promoción de la poesía, a nivel del mundo de habla hispana, conlleva una enorme responsabilidad, por ello, pedimos la máxima implicación de todos los miembros de Alaire. Vale recordar al gran maestro Dumas: uno para todos y todos para uno. Muchas gracias por todo, queridos compañeros.
En aras del dulce sueño
el que convoca a la siesta
una mosca, está de fiesta
con su zumbido risueño.
En dormir, pongo mi empeño
cansado de las calores
del estío y sus rigores
mas sin conseguir siquiera
pegar ojo a la primera
empapadito en sudores.
Miro al techo fijamente
en mi tortuosa vigilia
mas ello poco concilia
por el zumbido evidente.
La mosca sigue presente
presente sigue la mosca
de forma molesta y tosca
es su vuelo insoportable
y es causa desagradable
cuando en mi cama se embosca.
Un batir de alas molesto
me retumba en los oídos
con sus rápidos latidos
provoca el alado insecto.
Tormento, martirio impuesto,
como mil sierras revueltas
son sus dos alas esbeltas.
Martillea en derredor
como incanzable motor
que no para de dar vueltas.
Los nervios a flor de piel
de tanto zumbido alado
soñoliento y muy cansado
por el insecto tan cruel.
Zafarrancho de cuartel
toco a la desesperada
contra la enemiga alada
y su osadía que es mucha;
siendo desigual la lucha
será bien pronto acabada...
Me levanto con un paño,
aquí, más allá... y me equiva
mas la mosca sigue viva
sin haber sufrido daño.
Diminutivo tamaño
es complicado prender
y es harto difícil ver
cuando cambia de posado
el dichoso insecto alado
y a mí me logra vencer…
Me sacó de mis casillas
que un insecto diminuto
tan ágil, veloz y astuto
me provocó pesadillas.
Ni con duras zapatillas
logré que de mí se fuera,
mas logró que no durmiera.
Aquí se acaba la historia
de la triunfante victoria
de la mosca cojonera.
Quinteño un amigo de Abelardo Castillo me dijo una vez que no existen temas menores en literatura eso me marcó para siempre y en este caso un tema que aparentemente es insignificante una mosca fíjate que si yo fuera buen critico cosa, que no lo soy, pues es un poema muy bien logrado, no existen temas menores en literatura, un placer pasar por tus letras.
javier
Me he reído a gusto con tu simpático poema. He tenido experiencia parecidas a ésta con algunas primas no menos molestas de tu mosca triunfal. He disfrutado tus décimas de buena factura y grato contenido.
Un abrazo.
Pepa
Prefiero ser verbal
y no adjetiva.
Perfecta ¿para qué?
si no es amandote.
A este Quinteño de Greda
algo le ha quitado el sueño.
Una mosca pone empeño
en que ya dormir no pueda
el inventor de la rueda
y el cazador del insecto.
Se le salió en el prospecto
para meterse en la fiesta
y hay que ver cómo le cuesta
dar un ronquido perfecto.
¡ y qué verdades más reverdades dices, míra que son pesadas, estoy segura que lo hacen para fastidiar, no hay otra solución, porque hay que ver... díme tyú si no...
En décimas, has plasmado genialmente la pesadez de una mosca.
Quinteño, lo que te pasa
es que no tienes paciencia
para apostar por la ciencia
al tentar la mosca gansa
que te toca las narices
con una gota de miel
sobre tu pálida piel
y un matamoscas a mano
para estrellar al alado
sin romperte las varices
Me has entretenido un montón con tu mosca cojonera.
Es un poema muy divertido, creado con una precisión de cirujano para hacernos reír, una fábula excelente. Mis abrazos y felicitaciones sinceras. Feliz fin de semana.