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Licantropía oscura

Publicado: Mar, 18 Jun 2013 18:28
por Ana Muela Sopeña
Suena la alarma en calles
donde la oscuridad casi metálica
me hace recordar
a los animales de la noche.

Licántropos de niebla
me atacan por la espalda
y me dictan mensajes al oído
para que me defienda
de la depredación y de la insania.

Aullidos en la bruma
me dirigen a mundos
de espíritus errantes.

Merodeo por las plazas
y diviso noctámbulos
paseando con lluvia su orfandad.

Encarnan
el alma subterránea
de esta ciudad sin nombre.

Son ellos las metáforas
de un solitario círculo
que insondable se alza
sobre los habitantes de la urbe.

Licantropía oscura
en la hermandad del frío.
Los hombres, como lobos,
persiguen sin descanso
las matrices de loto.

Dicen que están buscando
el placer del momento,
pero lo que persiguen realmente
es penetrar el numen de la luz
para engendrar la sombra más abyecta
y que nazcan los híbridos sin ojos.

Licantropía oscura,
yo escapo de tus fauces
y me refugio en barrios de suburbios.

Deseo comprender
la alquimia de tus códigos,
tu penuria escondida
y la ecuación maldita de tu sombra.

Sombra que está quemando
las células de cobre
de todos los humanos.

La humanidad aspira a ser de cuantum
con frecuencias lumínicas de estrellas,
pero también
en las mitocondrias del genoma
anidan
los anhelos licántropos de niebla
en lucha predadora
por siglos y por siglos.

Parece una partida de ajedrez
donde las blancas tienen la estrategia
para culminar su jaque mate,
pero las negras han tomado el centro
y no quieren dejar sus posiciones.

Licantropía oscura,
la que tiembla en los goznes de las puertas
y nos lleva a abrazar
a través de la cópula
de los amantes árticos del tiempo
la fuerza involutiva paleolítica.

Bibliotecas de árboles y estrellas
con los pulsos errantes de la historia,
ampáranos con tu luz
en liturgia de besos, en los muelles,
para que los licántropos
que aúllan
y están en nuestro código genético
se transformen en lobos de las Pléyades
y sean mensajeros de otro sol.


Ana Muela Sopeña

Publicado: Mar, 18 Jun 2013 19:46
por Guillermo Cumar.
Poética mirada bajo las sombras de la noche
y el sentir y disentir de las penumbras al temple de buena poesía.

un abrazo

Publicado: Mar, 18 Jun 2013 19:59
por Hallie Hernández Alfaro
Todos los elementos y claves formando un cielo de oscuridad y destino inapelables.

A pesar del metal, el asfalto, la bestia, el pálpito y el alma tocada, el resplandor es enorme.

Aplausos miles, Ana!

Un abrazote.

re: Licantropía oscura

Publicado: Mar, 18 Jun 2013 20:10
por Just Gafar
De principio a fin, el poema sucumbe en tu voz, Ana. Imágenes, sensaciones, yo voy tomado de tu mano hasta el cantar del último verso. Y aúlla, esta tarde mia, aúlla.

Un placer de lectura.

Abrazos.

re: Licantropía oscura

Publicado: Mar, 18 Jun 2013 20:21
por Pilar Morte
Suena hermosa tu voz en este poema profundo y dicente. Un placer
Besos
Pilar

Re: Licantropía oscura

Publicado: Mar, 18 Jun 2013 21:43
por Roberto López
[quote="Ana Muela Sopeña"]

Qué bien reflejas las pesadillas de la urbe, la peregrinación derrotada desde la noche, vivida como un ideal, hacia el refugio, la habitación que sirve como un colador que deja a un lado la fibra inútil del mito y al otro la fatiga de la rutina. Me ha gustado mucho. Un abrazo.

Re: Licantropía oscura

Publicado: Mar, 18 Jun 2013 22:06
por Víctor F. Mallada
Aplauso hasta con las orejas, Ana. (Moverlas es señal de licantropía). Muy bueno el ritmo, mantenido desde principio al fin. Hay lobos y hay corderos, hay poetas y hay pretextos.

Déjame decirte que me ha gustado mucho esta propuesta.

Un abrazo, poeta.

Víctor

re: Licantropía oscura

Publicado: Mar, 18 Jun 2013 23:04
por J. J. Martínez Ferreiro
Un poema muy potente, querida Ana; sus espléndidas imágenes van describiendo un inframundo de inquietud y desolación, donde la noche se erige en un espacio que excita sus monstruos.

Biquiños.

Publicado: Mié, 19 Jun 2013 1:17
por Ana Muela Sopeña
Muchas gracias, Guillermo, por tu lectura atenta y amable.

Un fuerte abrazo
Ana

re: Licantropía oscura

Publicado: Mié, 19 Jun 2013 3:23
por Óscar Distéfano
Un poema que desnuda nuestra animalidad primigenia. describe con incisivos versos el submundo donde siguen pululando los demonios y las bestias, la terrible oscuridad de nuestra propia conciencia. Un poema de adecuado ritmo que he disfrutado leer.

Un abrazo.
Óscar

Publicado: Mié, 19 Jun 2013 15:55
por Ana Muela Sopeña
Hallie, siempre es un honor tu paso por mis poemas.

Besos enormes
y gracias
Ana

re: Licantropía oscura

Publicado: Jue, 20 Jun 2013 14:05
por Ana Muela Sopeña
Gracias, Just, por compartir este aullido.

Un beso
Ana

Publicado: Jue, 20 Jun 2013 14:06
por Ana Muela Sopeña
Gracias, Pilar, por venir...

Un beso
Ana

Publicado: Jue, 20 Jun 2013 14:06
por Ana Muela Sopeña
Roberto:

Me gusta mucho tu comentario.

Un beso
Ana

Re: Licantropía oscura

Publicado: Jue, 20 Jun 2013 16:26
por E. R. Aristy
Ana Muela Sopeña escribió:Suena la alarma en calles
donde la oscuridad casi metálica
me hace recordar
a los animales de la noche.

Licántropos de niebla
me atacan por la espalda
y me dictan mensajes al oído
para que me defienda
de la depredación y de la insania.

Aullidos en la bruma
me dirigen a mundos
de espíritus errantes.

Merodeo por las plazas
y diviso noctámbulos
paseando con lluvia su orfandad.

Encarnan
el alma subterránea
de esta ciudad sin nombre.

Son ellos las metáforas
de un solitario círculo
que insondable se alza
sobre los habitantes de la urbe.

Licantropía oscura
en la hermandad del frío.
Los hombres, como lobos,
persiguen sin descanso
las matrices de loto.

Dicen que están buscando
el placer del momento,
pero lo que persiguen realmente
es penetrar el numen de la luz
para engendrar la sombra más abyecta
y que nazcan los híbridos sin ojos.

Licantropía oscura,
yo escapo de tus fauces
y me refugio en barrios de suburbios.

Deseo comprender
la alquimia de tus códigos,
tu penuria escondida
y la ecuación maldita de tu sombra.

Sombra que está quemando
las células de cobre
de todos los humanos.

La humanidad aspira a ser de cuantum
con frecuencias lumínicas de estrellas,
pero también
en las mitocondrias del genoma
anidan
los anhelos licántropos de niebla
en lucha predadora
por siglos y por siglos.

Parece una partida de ajedrez
donde las blancas tienen la estrategia
para culminar su jaque mate,
pero las negras han tomado el centro
y no quieren dejar sus posiciones.

Licantropía oscura,
la que tiembla en los goznes de las puertas
y nos lleva a abrazar
a través de la cópula
de los amantes árticos del tiempo
la fuerza involutiva paleolítica.

Bibliotecas de árboles y estrellas
con los pulsos errantes de la historia,
ampáranos con tu luz
en liturgia de besos, en los muelles,
para que los licántropos
que aúllan
y están en nuestro código genético
se transformen en lobos de las Pléyades
y sean mensajeros de otro sol.


Ana Muela Sopeña

Excelente, Ana. Creo que si vamos a saber quienes somos no podemos pasar por alto a ninguno de los angeles. Un fuerte abrazo, ERA