Editorial Alaire

Ya te lo dije, esto consiste en tejer un hilo a ganchillo y se tarda toda una vida, un hilo tenue, como las alas de colibrí cuando nace o el maullido de un gato de tan sólo dos días, se puede quebrar en un instante, un gesto.

A ti siempre te gusto la piel de cordero, la palabra dulzona que ocultaba su olor rancio, pero claro, no entiendes de principios. No es de extrañar si jugaste con jeringuillas cargadas de gritos acético y amorataban tu carne con tacones sin tapa.

Sé que no eres culpable, pero no soporto más pasarme el día poniendo tiritas sobre las grietas, anudando cada uno de tus quicios y ensordeciendo de falacia.

Tu realidad está tan alejada de la mía.

No sé dónde perdiste la conciencia; en algún parking de tierra a orillas del garito de moda o en esos viajes que te pegas sin salir de casa. Tú sigues viviendo en un oasis rodeado de desierto, en lagunas de lluvia que no son más que charcos.

Ya son muchas las batallas que no he vencido, he vivido en guerra toda una infancia, y no es que me rinda o no me queden armas, creo que la retaguardia puede ser una buena estrategia para vencernos, porque aquí los héroes ni vuelan ni tienen capa, sólo uñas para cavar la tierra y enterrar los miedos.

Ya te lo dije, los hechos pueden ser ahora el único conducto, el cauce para retornar al río y ser de nuevo agua transparente. Hoy está turbia y tiene demasiadas piedras.

Todo es cuestión de confianza

Sandra Gª Garrido escribió:Ya te lo dije, esto consiste en tejer un hilo a ganchillo y se tarda toda una vida, un hilo tenue, como las alas de colibrí cuando nace o el maullido de un gato de tan sólo dos días, se puede quebrar en un instante, un gesto.

A ti siempre te gusto la piel de cordero, la palabra dulzona que ocultaba su olor rancio, pero claro, no entiendes de principios. No es de extrañar si jugaste con jeringuillas cargadas de gritos acético y amorataban tu carne con tacones sin tapa.

Sé que no eres culpable, pero no soporto más pasarme el día poniendo tiritas sobre las grietas, anudando cada uno de tus quicios y ensordeciendo de falacia.

Tu realidad está tan alejada de la mía.

No sé dónde perdiste la conciencia; en algún parking de tierra a orillas del garito de moda o en esos viajes que te pegas sin salir de casa. Tú sigues viviendo en un oasis rodeado de desierto, en lagunas de lluvia que no son más que charcos.

Ya son muchas las batallas que no he vencido, he vivido en guerra toda una infancia, y no es que me rinda o no me queden armas, creo que la retaguardia puede ser una buena estrategia para vencernos, porque aquí los héroes ni vuelan ni tienen capa, sólo uñas para cavar la tierra y enterrar los miedos.

Ya te lo dije, los hechos pueden ser ahora el único conducto, el cauce para retornar al río y ser de nuevo agua transparente. Hoy esta turbia y tiene demasiadas piedras.

Todo es cuestión de confianza

Leí ayer tu Carta de Ajuste, Sandra. Me conmocionó tanto que dejé mi respuesta para unas horas más tarde y ya ves, se me ha hecho domingo sin casi darme cuenta.

La honestidad y la entrega en el lenguaje sacude las líneas. Es como saberse bajo un árbol muy antiguo al que perdonamos por la lluvia helada que nos empapa. Claves íntimas y sabiamente encajadas en cada lingote lírico que nos compartes. Se percibe amor en todas las rendijas.

Un final sin abismos; abierto, lúcido, afectuoso.

Aplausos y felicitaciones.

Abrazo fuerte.



PD: creo que por error de tipeo falta un tilde en está (penúltima línea)

Muchas gracias amiga,

A veces son muy necesarias las letras, esta carta tiene una destinataria real, tal vez sea por ello conmociona, por su relidad impresa. Aunque adorne algunas frases, son esas cartas tan necesarias aunque seguramente sin destino.

Un abrazo

P.D Gracias por la tílde, ya la corregí.

Sube con aplausos!

Estimada Sandra, esto es una joya, no te imaginas como me place haber llegado a esta cruda carta, es como si hubieras bebido la copa del dolor y al sentirlo con fuerza en la garganta sueltas todas estas letras que dejan huella y sentimiento, hermoso en verdad!
Un abrazo.

Una joya, Sandra! con la fuerza que te caracteriza, se lee casi como respirar. Sí, lo dices bien, son aquellas cartas que se piensan y no llegan a enviarse. Me encantó pasar por aquí.

Un beso

Carmen

Alfonso Alfaro escribió:Estimada Sandra, esto es una joya, no te imaginas como me place haber llegado a esta cruda carta, es como si hubieras bebido la copa del dolor y al sentirlo con fuerza en la garganta sueltas todas estas letras que dejan huella y sentimiento, hermoso en verdad!
Un abrazo.

Alfonso, disculpa no haberte respondido, las notificaciones no me llegan al correo actual y tengo que ir buceando, y hoy me llevé la sorpresa de tu comentario. Muchas gracias, seguramente lo que dices es tan cierto como real la carta, creo que esto lo escribí para purgarme aunque la destinataria nunca llegó a leerla.

Un saludo

Carmen López escribió:Una joya, Sandra! con la fuerza que te caracteriza, se lee casi como respirar. Sí, lo dices bien, son aquellas cartas que se piensan y no llegan a enviarse. Me encantó pasar por aquí.

Un beso

Carmen

Querida Amiga, al igual que le digo Alfonso, disculpa en no responder antes. Me suele pasar que subo poemas y luego no respondo a los foristas y es que las notificaciones no me llegan y luego tardo en volver a entrar porque la vida me deja poco tiempo y ya pierdo el hilo, jaja
Gracias por tu comentario, lo atesoro.
Un abrazo