DIARIOS DE SAL
Publicado: Mar, 09 Abr 2013 8:08
Presiento la mañana que me vuelve voz
de nuevo entre tus alas,
que recuerda las palabras que han traído
las caricias que aun descansan
en los brazos de un destino que no cesa,
y te nombro,
nuevamente te encuentro entre los dedos
como ayer cuando soñabas,
cuando escribimos diarios de sal
sobre las aguas.
Hoy no quiero recordarte
y sin embargo tu boca se escapa
entre las grietas de la carne
que añora,
que grita a los vuelos de tu sombra
y pide,
suplica los huecos de tu abrazo
hiriendo la mañana,
que rompe la ventana de tus ojos
buscando los refugios de alabastro
del inquieto recorrido de tu piel
hacia el norte infinito de tu pecho.
Me has hecho del barro de tus labios
y vuelvo cada día a tu palabra,
porque sin ti la arena se equivoca
y olvida el mar la ola en el abrazo,
y no hay poesía, ni música, ni canto,
ni siquiera un llanto en busca de mirada,
nada…
Vuelvo a ti, vestido de futuro,
en un rincón del tiempo indefinido,
cautivo de tu boca, encadenado
a la memoria impenetrable de tu olvido…
enamorado.
de nuevo entre tus alas,
que recuerda las palabras que han traído
las caricias que aun descansan
en los brazos de un destino que no cesa,
y te nombro,
nuevamente te encuentro entre los dedos
como ayer cuando soñabas,
cuando escribimos diarios de sal
sobre las aguas.
Hoy no quiero recordarte
y sin embargo tu boca se escapa
entre las grietas de la carne
que añora,
que grita a los vuelos de tu sombra
y pide,
suplica los huecos de tu abrazo
hiriendo la mañana,
que rompe la ventana de tus ojos
buscando los refugios de alabastro
del inquieto recorrido de tu piel
hacia el norte infinito de tu pecho.
Me has hecho del barro de tus labios
y vuelvo cada día a tu palabra,
porque sin ti la arena se equivoca
y olvida el mar la ola en el abrazo,
y no hay poesía, ni música, ni canto,
ni siquiera un llanto en busca de mirada,
nada…
Vuelvo a ti, vestido de futuro,
en un rincón del tiempo indefinido,
cautivo de tu boca, encadenado
a la memoria impenetrable de tu olvido…
enamorado.