UN SER EXTRAORDINARIO...

[Jorge Salvador]

La parca le esperó tras de una esquina
en más que mal momento,
la culpa fue del viento
y de ese macetero
traidor y de la furia repentina
que el diablo le imprimiera;
impacto occipital de aquí te espero
y and<ndo pa la era.

La suerte, como siempre caprichosa,
pusiera al mozalbete
de pronto en grande brete...
quedarse sin latidos
cargado de caudales de dudosa
e ilícita apariencia
con pinta de haber sido conseguidos
sin pizca de conciencia.

-"Gregorio, ¿no te suena ese mengano?
-rumiaba algún viandante-.
-"Sí claro, es un cantante..."
-"¿Qué coño? es un ministro."
De pronto se soltaron de su mano
dos negros maletines
y todo el pastizal de aquel gran fistro
rodó a los adoquines.

Formose ante el cadáver tal tumulto
de gente enloquecida
buscándose la vida
detrás de los billetes,
que pronto aquello fue Vietnam, y el bulto
de aquel descerebrado
corrupto desde el alma a los mofletes
fue entero pateado.

Aunque hubo mil testigos del ultraje
y atraco al pobre muerto,
el juicio, antes de abierto,
quedó sobreseído,
a ver quién denunciaba el sabotaje...
tan sólo un comentario
en twitter cariñoso del partido:
-"Fue un ser extraordinario..."

[Guillermo Cumar.]

Joge no sé leer lo que escribiste, pues aparece todo en un lenguaje de signos desconocido.
A la vista quedo bonito, pero mis entendederas no se enteran.

No sé si es error o libre albedrío tuyo.

Un abrazo

[Jorge Salvador]

Joge no sé leer lo que escribiste, pues aparece todo en un lenguaje de signos desconocido.
A la vista quedo bonito, pero mis entendederas no se enteran.

No sé si es error o libre albedrío tuyo.

Un abrazo

No sé Guillermo, yo lo veo bien en mi pantalla, sí me salían un montón de signos raros pero ya los edité y los quité. Lamento el problema, intentaré ver qué ha pasado.
Muchas gracias

[Jorge Salvador]

La parca le esperó tras de una esquina
en más que mal momento,
la culpa fue del viento
y de ese macetero
traidor y de la furia repentina
que el diablo le imprimiera;
impacto occipital de aquí te espero
y and<ndo pa la era.

La suerte, como siempre caprichosa,
pusiera al mozalbete
de pronto en grande brete...
quedarse sin latidos
cargado de caudales de dudosa
e ilícita apariencia
con pinta de haber sido conseguidos
sin pizca de conciencia.

-"Gregorio, ¿no te suena ese mengano?
-rumiaba algún viandante-.
-"Sí claro, es un cantante..."
-"¿Qué coño? es un ministro."
De pronto se soltaron de su mano
dos negros maletines
y todo el pastizal de aquel gran fistro
rodó a los adoquines.

Formose ante el cadáver tal tumulto
de gente enloquecida
buscándose la vida
detrás de los billetes,
que pronto aquello fue Vietnam, y el bulto
de aquel descerebrado
corrupto desde el alma a los mofletes
fue entero pateado.

Aunque hubo mil testigos del ultraje
y atraco al pobre muerto,
el juicio, antes de abierto,
quedó sobreseído,
a ver quién denunciaba el sabotaje...
tan sólo un comentario
en twitter cariñoso del partido:
-"Fue un ser extraordinario..."


Pido perdón, me he liado y ya no sé ni lo que estoy haciendo, quería modificarlo para que se viera bien y ahora me sale abajo como un comentario otra vez el poema. En fin, que lo siento pero no sé ni lo que he hecho

[Josefa A. Sánchez]

Pues lo que has hecho es darnos la oportunidad de reírnos dos veces, que nunca viene mal con los tiempos que corren.

La lluvia de dinero
sería necesario que arreciara
sin que se desplomara
teja, ni macetero
y a todos nos pillara
en pleno descampado el aguacero.

Siempre un placer contagiarse de tu pluma.
Un abrazo.
Pepa

[Jorge Salvador]

Pues lo que has hecho es darnos la oportunidad de reírnos dos veces, que nunca viene mal con los tiempos que corren.

La lluvia de dinero
sería necesario que arreciara
sin que se desplomara
teja, ni macetero
y a todos nos pillara
en pleno descampado el aguacero.

Siempre un placer contagiarse de tu pluma.
Un abrazo.
Pepa

O espantar a los pocos que vengan a leerme y que piensen: si era poco martirio una vez, va y nos la pone por duplicado...
Por cierto, extraordinario complemento el que has puesto a mis versos, más que contagiarte los has dejado en mantillas.
El placer es mío Pepa...