Editorial Alaire

La sed.

Dijo: “Tengo sed” Juan.19-28

Golpeaba la angustia del acento
el agua deseada y fugitiva
y la madre como fuente viva
licuando el corazón por el aliento.

¡Qué desiertos de arena por el viento
en la última jornada decisiva!
Alas quiso poner en su saliva
para calmar la boca del sediento.

Y el agua de las nubes y el rocío,
la que el Padre creó, se le negaba
y seguía peregrina, indiferente
justificando el mar y creando el río
y a los pies de la cruz la madre estaba
vertiéndose de amor como una fuente.

Carmina.

Un poema emotivo y hermoso. Un gusto pasar por tus letras
besos
Pilar

Carmina, emotivo y bíblico soneto, lleno de fuerza.
un placer leerte, amiga.

un abrazo

Carmina, qué bíblico y buen soneto compartes.
Me ha encantado.
Un abrazo.

Me gusta que el poema se centre en el amor de la madre que se vierte de amor por su hijo. Y además está muy bien escrito, con una gran fuerza visual. Un placer venir.
Un abrazo.
Pepa

Pilar Morte escribió:Un poema emotivo y hermoso. Un gusto pasar por tus letras
besos
Pilar

Gracias Pilar por tus palabras escritas, un abrazo para ti.

Guillermo Cuesta escribió:Carmina, emotivo y bíblico soneto, lleno de fuerza.
un placer leerte, amiga.

un abrazo

Gracias Guillermo, un abrazo poético para ti.

Quinteño de Greda escribió:Carmina, qué bíblico y buen soneto compartes.
Me ha encantado.
Un abrazo.

Gracias Quinteño por tu comentario, un abrazo para ti.

Josefa A. Sánchez escribió:Me gusta que el poema se centre en el amor de la madre que se vierte de amor por su hijo. Y además está muy bien escrito, con una gran fuerza visual. Un placer venir.
Un abrazo.
Pepa

Gracias Pepa, por tu presncia, un abrazo poético para ti.