Del verde habitado
Publicado: Lun, 18 Mar 2013 20:42
Recuérdame Maria
que no somos cuerpos sino días,
que las ofertas de enero
caducan sin aviso previo,
que la lluvia de invierno
si moja los pies de estos versos.
Recuérdame apagar las naranjas
pero dejar encendido al turpial.
El nombre de hojalata que tiene tu calle
y no dudar ante tus lunares,
mirar al fondo del poema,
enredarme sin retorno en el vicio de tus piernas.
Recuérdame comprar dos boletos,
pero sólo de ida, a Liubliana,
arreglar la escalera primero
para después la ventana.
Recuérdame mi nacionalidad
la de pájaro y la que sueño.
Recuérdame el hilo de tus dolores,
el color de tus ojos, son verdes o marrones?
Recuerdame el sepia sagrado
de tu corazón alocado
y dejar siempre propinas.
que no somos cuerpos sino días,
que las ofertas de enero
caducan sin aviso previo,
que la lluvia de invierno
si moja los pies de estos versos.
Recuérdame apagar las naranjas
pero dejar encendido al turpial.
El nombre de hojalata que tiene tu calle
y no dudar ante tus lunares,
mirar al fondo del poema,
enredarme sin retorno en el vicio de tus piernas.
Recuérdame comprar dos boletos,
pero sólo de ida, a Liubliana,
arreglar la escalera primero
para después la ventana.
Recuérdame mi nacionalidad
la de pájaro y la que sueño.
Recuérdame el hilo de tus dolores,
el color de tus ojos, son verdes o marrones?
Recuerdame el sepia sagrado
de tu corazón alocado
y dejar siempre propinas.