Editorial Alaire

Carmina Martínez escribió:La primavera y yo.


Yo soy como la primavera
sembrada en mi cuarto oscuro
y soy el peso más puro
para una sombra ligera.
Dejo abandonado fuera
el martillo del rencor
el mazo del desamor
y la espada del agravio.
Ahora tengo nuevo el labio
para estrenarlo en la flor.

Una primavera eterna
hay entre mis altos muros,
con los aromas maduros
y con la madera tierna.
Horizonte quieto y llano
donde voy sembrando el grano
de mis locas fantasías…
Me nace todos los días
el clavel bajo la mano.

La primavera se pasa
y llega el otoño herido,
la sangre se le ha caído
a la puerta de mi casa.
Es un otoño que abraza
con su rezagada hoguera
más no puedo aunque quisiera
asustarme la otoñada
¡Tengo la puerta cerrada
Y yo vivo a mi manera!

Ya no me importa el final
de la primavera que huye.
Mi soledad reconstruye
el arroyo el rosal.
Más…si quiero ser rival
de lo que ha de concluir,
mi puerta no debo abrir
al tiempo y a su llamada…
¡La primavera encerrada
no se me puede morir!

Carmina.

Quinteño de Greda escribió:Hermosas espinelas sobre la primavera, estima amiga Carmina.

Dos sugerencias, cuando vayas a postear, desactiva el editor virtual, sito arriba a la derecha del cuadro de diálogos, y así, no te salen los signos extraños.
La tilde en la palabra mas, está de más, pues no lo usas como adverbio de cantidad, y si como preposición.

Recibe mis más sinceras felicitaciones.
Un abrazo.

Ana Muela Sopeña escribió:Carmina:

Preciosas espinelas. Musicalidad, hermosas rimas y buen decir.

Te felicito
Abrazos
Ana

Guillermo Cuesta escribió:Bellas, bellas, bellas tus décimas, Carmina. Un buen recorrido por tu versal primavera.

un abrazo

Pilar Morte escribió:Preciosas espinelas donde se aprecia amor y sensibilidad. Un placer
Abrazos
Pilar