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Como la morada del hambre

Publicado: Mar, 05 Feb 2013 14:34
por Marius Gabureanu
Cuando te encontré fue como si pisara una mina
camuflada
en los campos donde la soledad se hace cuerpo de mujer,
me detuvo la inminente rana de acero debajo de los pies,
la pertinaz falacia de la materia alborotada,
esos intestinos de trigo que poblaron los interiores de la sombra
de canastas de lluvia, de cantos improcedentes
como si supiéramos que nos íbamos a extinguir
por un capricho de horas o un golpe de caballo.
Allí, estáticos como la morada del hambre por los siglos
quedamos en conjurar los basaltos, fuimos testigos
de la abducción de cera de los deltoides de la noche,
fuimos arañas caídas en el vientre de una guitarra
y la mano de la ira hizo romper las cuerdas del destino
y nos manchamos con el polen de las tardes amarillas
infartados por la memoria del árbol de las guillotinas
cuyos sangrantes cabezas de horizonte
cayeron frutos
sobre los brazos de un día recién nacido
que no pudieron alcanzar su chupete de luz...
Si pudieras poner un caudal de broches de luna sobre la música
ahora que escucho el latente vibrar de la inercia,
su único movimiento indefinible de horas
y remover los tobillos de lo perplejo,
quitarle un poco de maquillaje a la muerte
para que busque la sangre de una ballena
y no sea la tinta del alma el contorno de sus labios.








Re: Como la morada del hambre

Publicado: Mar, 05 Feb 2013 15:17
por Luna de Nos
Marius Gabureanu escribió:Cuando te encontré fue como si pisara una mina
camuflada
en los campos donde la soledad se hace cuerpo de mujer,
me detuvo la inminente rana de acero debajo de los pies,
la pertinaz falacia de la materia alborotada,
esos intestinos de trigo que poblaron los interiores de la sombra
de canastas de lluvia, de cantos improcedentes
como si supiéramos que nos íbamos a extinguir
por un capricho de horas o un golpe de caballo.
Allí, estáticos como la morada del hambre por los siglos
quedamos en conjurar los basaltos, fuimos testigos
de la abducción de cera de los deltoides de la noche,
fuimos arañas caídas en el vientre de una guitarra
y la mano de la ira hizo romper las cuerdas del destino
y nos manchamos con el polen de las tardes amarillas
infartados por la memoria del árbol de las guillotinas
cuyos sangrantes cabezas de horizonte
cayeron frutos
sobre los brazos de un día recién nacido
que no pudieron alcanzar su chupete de luz...
Si pudieras poner un caudal de broches de luna sobre la música
ahora que escucho el latente vibrar de la inercia,
su único movimiento indefinible de horas
y remover los tobillos de lo perplejo,
quitarle un poco de maquillaje a la muerte
para que busque la sangre de una ballena
y no sea la tinta del alma el contorno de sus labios.

Marius, es tan rico el lenguaje, son tan destellantes las imágenes, que hago mío el comienzo de tu poema en esos versos:

'fue como si pisara una mina
camuflada'

por el efecto que produjo leer este poema. Arañas-dedos que redoblan en sonoridad el tañir de las palabras. Un abrazo, Luna.-

Publicado: Mar, 05 Feb 2013 15:41
por Wilmer Uzcategi
Desnudez masiva de los adentros....También es una manera de envolver a la seducción volverla una estrategia bastante acertada. ¡Me ha encantado leerte! Gracias por el deleite.

Salute!

re: Como la morada del hambre

Publicado: Mar, 05 Feb 2013 17:10
por Pilar Morte
Potentes imágenes en un profundo poema. Un placer leerte
Abrazos
Pilar

Publicado: Mar, 05 Feb 2013 17:19
por Ana Muela Sopeña
Qué buen poema donde lo romántico emplea unas imágenes surrealistas. Paisaje interior y exterior se funden en un abrazo perfecto.

Me pareces un gran poeta

Felicidades
y enhorabuena
Ana

Re: Como la morada del hambre

Publicado: Mar, 05 Feb 2013 19:42
por Hallie Hernández Alfaro
Marius Gabureanu escribió:Cuando te encontré fue como si pisara una mina
camuflada
en los campos donde la soledad se hace cuerpo de mujer,
me detuvo la inminente rana de acero debajo de los pies,
la pertinaz falacia de la materia alborotada,
esos intestinos de trigo que poblaron los interiores de la sombra
de canastas de lluvia, de cantos improcedentes
como si supiéramos que nos íbamos a extinguir
por un capricho de horas o un golpe de caballo.
Allí, estáticos como la morada del hambre por los siglos
quedamos en conjurar los basaltos, fuimos testigos
de la abducción de cera de los deltoides de la noche,
fuimos arañas caídas en el vientre de una guitarra
y la mano de la ira hizo romper las cuerdas del destino
y nos manchamos con el polen de las tardes amarillas
infartados por la memoria del árbol de las guillotinas
cuyos sangrantes cabezas de horizonte
cayeron frutos
sobre los brazos de un día recién nacido
que no pudieron alcanzar su chupete de luz...
Si pudieras poner un caudal de broches de luna sobre la música
ahora que escucho el latente vibrar de la inercia,
su único movimiento indefinible de horas
y remover los tobillos de lo perplejo,
quitarle un poco de maquillaje a la muerte
para que busque la sangre de una ballena
y no sea la tinta del alma el contorno de sus labios.















Majestuosidad de imágenes que tocan la materia para embellecerla. Es como si el universo debiera guardar segundos de vida para sentir las embestidas y el fulgor de cada sentimiento.


Aquí en estos versos:

"Allí, estáticos como la morada del hambre por los siglos
quedamos en conjurar los basaltos, fuimos testigos
de la abducción de cera de los deltoides de la noche,
fuimos arañas caídas en el vientre de una guitarra
y la mano de la ira hizo romper las cuerdas del destino
y nos manchamos con el polen de las tardes amarillas
infartados por la memoria del árbol de las guillotinas"


hay filtraciones preciosas, salvoconductos, lucidez espasmódica, fuerza, indestructibilidad, un gas que no cede a la bulimia de su único ojo.


Y este cierre, extremadamente hermoso:

"Si pudieras poner un caudal de broches de luna sobre la música
ahora que escucho el latente vibrar de la inercia,
su único movimiento indefinible de horas
y remover los tobillos de lo perplejo,
quitarle un poco de maquillaje a la muerte
para que busque la sangre de una ballena
y no sea la tinta del alma el contorno de sus labios."


Ha sido una delicia habitar este poema, Marius.

Aplausos miles,

Hallie

Publicado: Mar, 05 Feb 2013 19:44
por Luis M
Exquisitas metáforas en un poema precioso. ...Tu talento e imaginación son enormes, querido amigo. Mis aplausos por esta joya surrealista, Marius. Un fuerte abrazo.

Publicado: Mar, 05 Feb 2013 19:46
por Israel Liñán
Es un poema impresionante Marius, las imágenes que utilizas, el vocabulario...

Un gran trabajo.

Un abrazo.

Publicado: Mié, 06 Feb 2013 13:17
por Guillermo Cumar.
Siempre es gratificante llegar a tus poemas, y ver la vida y
las sensaciones danzando a golpe de metáfora y de aliento.

un abrazo

Publicado: Jue, 07 Feb 2013 3:27
por Josefa A. Sánchez
La imágenes te envuelven como una inmensa ola, que te golpea y te arroja sobre la orilla de los versos. Un placer de lectura.
Un abrazo.
Pepa

Publicado: Vie, 01 Mar 2013 7:22
por Rafel Calle
Bellísimo evento metafórico de Marius.

re: Como la morada del hambre

Publicado: Vie, 01 Mar 2013 8:45
por J. J. Martínez Ferreiro
fuimos arañas caídas en el vientre de una guitarra
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y remover los tobillos de lo perplejo,
quitarle un poco de maquillaje a la muerte
para que busque la sangre de una ballena
y no sea la tinta del alma el contorno de sus labios.

Señalo estos momentos, pero en cada uno de los versos chispea el mismo brillo de alto kilate de este metal poético.

Para leer y releer poco a poco y disfrutar, que para eso venimos a estos sitios.

Un abrazo

Re: Como la morada del hambre

Publicado: Vie, 01 Mar 2013 9:13
por Roberto López
[quote="Marius Gabureanu"]

Bello discurrir por una larga cadena de metáforas contundentes, sobre un paisaje figurativo rico y multifacético. Un abrazo.