Editorial Alaire

Es Torre de Belem, tu fiel vigía,
al pie del río Tajo que te baña,
que, sobre tus colinas, ¡ay entraña!
proteges la ciudad, con regia ría.

¡Ay! calles empedradas con tranvía,
de tránsitos raíles a montaña,
así, vas tú subiendo a la compaña,
a seres con sus almas cada día.

¡Oh! tierra portuguesa “mi obrigado.”
¡Oh! canto de mi canto y de mi loa,
otrora la Olissipo fue pasado,

vestigio de marinos que, en su proa,
cantaron con saudades en su fado:
atrás te dejo amor... ¡Bela Lisboa!

Qué facilidad para escribir sonetos, os envidio. Un gusto pasarme por tus versos
Abrazos
Pilar

Quinteño. He vuelto a contemplar la Torre de Belem, el monumento
a los conquistadores y el circular estrecho del tranvía por las calles
empedradas. he vuelta a recordar, molto obrigado, que
es bela Lisboa y belo Portugal, tan vecinos como iguales y como amigos.

Un abrazo

Guillermo

Bello soneto, un deleite la lectura.
Abrazos

Bonita ciudad y bonito el homenaje que aquí dejas, Quinteño.

Qué facil parecen los sonetos cuando están tan bien escritos. Un placer su lectura y el recuerdo de una ciudad encantadora.

Víctor

No conozco Lisboa, pero lo hermoso de tus versos despierta recuerdos de cosas no vividas. Un placer.
Un abrazo.
Pepa

Quinteño, su soneto es precioso,
su talento poético es inagotable,
le felicito y le dejo bendiciones.
Un placer leerle.

Me encanta Lisboa, amigo Quinteño, y haces un bonito homenaje a una ciudad que tiene un "algo" que te atrapa.

Un abrazo.

Muchas gracias a los compañeros que dejaron su amable huella.