Editorial Alaire

DOS LADOS DE LA BALANZA


Hoy uso la balanza.
En un plato coloco: la savia de la infancia
cuando aún no había dado la espalda (todavía miraba de frente)
ni empezado a morderme las uñas,
el hallazgo de las raíces y el camino sinuoso de las metas,
el dulce engendro de mi vientre
y la vida sellada en las vísceras.

En el otro plato
la sal de las lágrimas que queman,
las cicatrices
que envolvió la derrota,
lo que erró el desamor al cabo de los días,
las culpas egoístas, la ilusión desgastada,
lo que perdura de la ira o de la espera truncada.

Me quiero engañar
e inclino la balanza en el lado del júbilo
poniendo pesas de sonrisas y frases inventadas,
la frágil esperanza de lo que queda.

No hace falta,
ese desequilibrio es solo la tristeza de lo no vivido,
son los espejos que nos devuelven
el perdón de los muertos y el secreto oculto.

Es miedo del dolor como final.

Las balanzas siempre tienden a estar de cualquier manera, menos paralelas. Me encantó tu poema, Pilar. Mi sincera felicitación, un abrazo.

Pandora no legó su caja para que quedara oculta y sellada, sino para inclinar la balanza de la justicia en el horror y la desesperanza... dentro y afuera uno es el mundo, pero la mirada honesta es un fuego de eternidad en el que la belleza y la verdad de la vida renacen vigorosas de las cenizas... con lágrimas formamos la pasta que en nuestras manos toma la forma del destino que creamos...

Ver, sí, con franqueza y sin concesiones es nobleza y gloria de la valentía...

Te abrazo con afecto...

Juan Marcos

Poema vital en el que la balanza marca dos etapas que, en realidad es solo una, la vida que vivimos y de la que aquí nos dejas bellas imágenes. Un placer su lectura, Pilar.

Un abrazo,

Víctor

LUIS MARIÑO escribió:Las balanzas siempre tienden a estar de cualquier manera, menos paralelas. Me encantó tu poema, Pilar. Mi sincera felicitación, un abrazo.

Me alegra que te gustase el poema. Gracias por tus generosa palabras.
Abrazos
Pilar

Pilar Morte escribió:DOS LADOS DE LA BALANZA


Hoy uso la balanza.
En un plato coloco: la savia de la infancia
cuando aún no había dado la espalda (todavía miraba de frente)
ni empezado a morderme las uñas,
el hallazgo de las raíces y el camino sinuoso de las metas,
el dulce engendro de mi vientre
y la vida sellada en las vísceras.

En el otro plato
la sal de las lágrimas que queman,
las cicatrices
que envolvió la derrota,
lo que erró el desamor al cabo de los días,
las culpas egoístas, la ilusión desgastada,
lo que perdura de la ira o de la espera truncada.

Me quiero engañar
e inclino la balanza en el lado del júbilo
poniendo pesas de sonrisas y frases inventadas,
la frágil esperanza de lo que queda.

No hace falta,
ese desequilibrio es solo la tristeza de lo no vivido,
son los espejos que nos devuelven
el perdón de los muertos y el secreto oculto.

Es miedo del dolor como final.

En absoluta honestidad los versos, con armoniosa y elocuente claridad. Un poema para leer y releer.
Besos y un abrazo muy fuerte para ti

Pilar Morte escribió:DOS LADOS DE LA BALANZA


Hoy uso la balanza.
En un plato coloco: la savia de la infancia
cuando aún no había dado la espalda (todavía miraba de frente)
ni empezado a morderme las uñas,
el hallazgo de las raíces y el camino sinuoso de las metas,
el dulce engendro de mi vientre
y la vida sellada en las vísceras.

En el otro plato
la sal de las lágrimas que queman,
las cicatrices
que envolvió la derrota,
lo que erró el desamor al cabo de los días,
las culpas egoístas, la ilusión desgastada,
lo que perdura de la ira o de la espera truncada.

Me quiero engañar
e inclino la balanza en el lado del júbilo
poniendo pesas de sonrisas y frases inventadas,
la frágil esperanza de lo que queda.

No hace falta,
ese desequilibrio es solo la tristeza de lo no vivido,
son los espejos que nos devuelven
el perdón de los muertos y el secreto oculto.

Es miedo del dolor como final.

..................................................................................
Hermoso trabajo, amiga Pilar, donde desarrollas una medición de la vida, sus circunstancias y sus consecuencias.
La poeta propone un lenguaje ameno, todo sinceridad y entrañablemente solidario con sus lectores.
Ha sido un placer leerte. Felicidades por este poema donde consigues versos muy hermosos.
Un fuerte abrazo.

Juan Marcos escribió:Pandora no legó su caja para que quedara oculta y sellada, sino para inclinar la balanza de la justicia en el horror y la desesperanza... dentro y afuera uno es el mundo, pero la mirada honesta es un fuego de eternidad en el que la belleza y la verdad de la vida renacen vigorosas de las cenizas... con lágrimas formamos la pasta que en nuestras manos toma la forma del destino que creamos...

Ver, sí, con franqueza y sin concesiones es nobleza y gloria de la valentía...

Te abrazo con afecto...

Juan Marcos

Me alegra verte por mis versos y agradezco tu amable y generoso comentario
Abrazos
Pilar

En esto de "la cosa de vivir" es mejor intentar no hacer balance; esta revisión vital sólo nos conduce a la melancolía. Además se nos puede quedar una cara de imbécil que para qué contar.


Un gusto siempre pasar por tus letras, compañera.

Víctor F. Mallada escribió:Poema vital en el que la balanza marca dos etapas que, en realidad es solo una, la vida que vivimos y de la que aquí nos dejas bellas imágenes. Un placer su lectura, Pilar.

Un abrazo,

Víctor

Gracias, Victor, me alegra y agradezco tu visita
Abrazos
Pilar

Es dificil poner el punto medio en su mitad, pero ese es el fervor
que hemos de poner para no sentirnos descerrajados.

Me ha encantado ese tono que pone el verso y los esfuerzos
en el sensor de la buena poesía.

un abrazo

Guillermo

Quédate con el lado bueno de la balanza, que al fin y al cabo son los recuerdos, tantos malos como buenos...
Un abrazo Pilar.

Mucha produndidad en tus versos, un placer venir. Mi saludo.

Poema exitencialista con un profundo e intresante mensaje nos dejas Pilar. Me gusto y disfruté leyendo

saludos

rafael

Un poema equilibrado, nunca mejor dicho, que juega con las dualidades de nuestro paso por la vida. Por eso nos identificamos todos con él de una u otra forma. Muy, pero que muy bueno tu poema, querida amiga.
Un abrazo
J. Manuel