Editorial Alaire

POLVO DE MARFIL


Quisiera ser el agua de tu cuerpo
recorrer tus adentros, ser tu vida,
para besar esos ojos tuyos
sin lágrimas que recorran
tu piel y tus mejillas
palpando mi amor y sus murmullos.

Vivir en ti, en tu guarida
y fusionar sin límites nuestra metamorfosis,
conocer tu aliento, tu sentir febril
lapidando los latidos a derroche
para convertirnos luego en polvo de marfil
y desde el cielo las almas fundidas convertir
en una sola estrella
y eternamente juntos existir.

Es hermoso cuando queremos fusionar nuestro cuerpo con el otro ser parte del otro interiorizarnos en el otro, todo se refiere a los sexos o no, mejor dicho el polvo de marfil no es un humano, un placer pasar por tus versos
javier

Versos que revisten anhelos ciertamente Blanca.
Un placer pasar por ellos.
Un abrazo.

Qué precioso ese polvo de marfil
que se convierte e amor y poesía.

un abrazo

Blanca, has plasmado un poema muy bello, versos suaves que nacen de tu sensibilidad, mis abrazos, felicitaciones sinceras.

javierdicenzo80 escribió:Es hermoso cuando queremos fusionar nuestro cuerpo con el otro ser parte del otro interiorizarnos en el otro, todo se refiere a los sexos o no, mejor dicho el polvo de marfil no es un humano, un placer pasar por tus versos
javier

Gracias Javier por este bonito comentario,
por su tiempo en estas letras, le dejo mis
saludos cordiales, espero que se encuentre
bien.

Quinteño de Greda escribió:Versos que revisten anhelos ciertamente Blanca.
Un placer pasar por ellos.
Un abrazo.

Mil gracias por su presencia,
le dejo mis saludos y bendiciones.

De un anhelo que depende de la correspondencia del deseo para adentrarse en el reino de la perfección, el subjuntivo imperfecto es la correcta forma de su manifestación... No puede imponerse a la otredad ni el anhelo propio ni el deseo... sólo esperar que en el espejo la comunión realice el milagro de la identidad y en la unidad del ser sea realidad...

En tus versos sencillez y profundidad nunca riñen ni en el fondo ni en la forma...

Te abrazo con afecto...

Juan Marcos

Le cantas al amor de una forma poéticamente hermosa. El polvo de marfil es un buen recurso, por lo original, para plasmar esos sentimientos.
Un placer de lectura.
J. Manuel