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EN LA VÍA DEL TAROT

Publicado: Vie, 16 Nov 2012 22:21
por Juan Marcos
[RIGHT]Un arte que no sirve para sanar no es arte.

Alejandro Jodorowsky[/RIGHT]

“Deshazte de lo que te incomoda, -dijo la voz-.
La verdad está en el equilibrio de la armonía,
y la armonía consiste en desechar lo superfluo
hasta llegar al núcleo de la existencia que es la muerte del ego.
Iluminación y vida serán uno en la eternidad del instante.”

Tres de cuatro en similar detalle,
la distinción se encuentra en uno
-aquél que no es principio ni es final-.
Dos de tres en la igualdad,
la distinción se encuentra en uno
-aquél que no es principio ni es final-.
En esto consiste la ley de la distinción en la igualdad,
camino de descenso y purificación.

Te llamé, te invoqué en el desamparo
y fue el silencio tu voz.
Pronto a la vista se presentó la imagen sedienta de sentido,
en tus manos florecieron jardines
y el amor ofreció el fruto amargo de la eternidad.

Un desfile de errantes,
en grotescos vestidos de fausto y ostentación,
buscando el sitial más elevado en un árbol carente de raíces y simiente:
laberinto de signos de Minotauro hambriento,
sin hebras proverbiales, ni Ariadnas, ni Teseos.

“Estoy en ti”, -dijo la voz-.
“Soy el espejo en ti en que se observa el mundo.
En el fuego de tu nombre arde la vanidad
y en la nada al final la verdad germina.”

Basta ya -grité-, me hiere la sombra de tu verbo.
Mientes en la verdad, maldito,
y pretendes perderme en la razón con la seducción de la elocuencia.

Los ardientes tizones de sus ojos incineraron el núcleo de mi ser
y, fulminante, ordenó la dispersión de las cenizas.
Guardé en silencio el instante de la muerte.

“Conocer la verdad no te aleja del camino del error, -dijo la voz-.
Miles son los pasos perdidos en la noche:
sin el brillo que nace de la esencia,
a merced están de los fuegos fatuos que acechan
a la vera de la locura y de la confusión.
Debes morir en una pieza,
dispersar las cenizas para que nada quede,
y renacer en mí
para que espejo y mundo sean en ti tu ser mismo.”

Pero el mundo es dolor -repliqué-,
y es dolor lo que unifica mi ser con el núcleo de la existencia,
el amor sólo ha sido un eco remoto y difuso,
la sombra sin forma en el altar de la memoria.
Y sin amor la muerte que nos mata carece de sentido.

“Vanidad de vanidades es el ser humano.
Vanidad de vanidades hasta la médula de los huesos, -dijo la voz-.
Siendo instruido se cree sabio,
mas desecha la ciencia de la sensatez.
Recuerda ahora y entiende:
¿No convertí en tinieblas el sol de tu razón?
De una vez entiende y ciñe tu espalda con la carga de la sabiduría,
porque la sabiduría es corona de luz para el entendimiento
y carga sin peso que da honra a la espalda que ciñe.
La gloria del mundo es la sombra de la realidad,
¿para qué buscar la sombra cuando tienes el cuerpo?
Ni el dolor ni el amor conforman la realidad del mundo:
fuegos son apagados cuyos rescoldos carecen de calor,
muertos errantes que abruman la memoria de los vivos,
torbellinos frenéticos del oscuro anhelo de la permanencia
que incineran su ser en hogueras de vanidad
para dejarlos postrados y vacíos.”

¿Y el grito de reclamo? ¿Y la justicia? -Exclamé-.
¿Es el mundo prisión y condena?
¿Cadalso al que sumisos avanzamos en el secreto de las complicidades
del vacío y la intrascendencia?
¡No! -Grité-. ¡Me niego a aceptarlo!
Sólo amor y dolor nos ofrecen la vida que nos niegan.
Sólo amor y dolor dan forma a la realidad del ser,
a la humanidad que somos,
aun en la insignificancia y en la intrascendencia.
Amo este instante de apariencia
en que soy con el mundo uno y todo,
aun cuando ni siquiera quede de mi rostro el cristalino destello de una lágrima.

Nada dijo la voz. Calló el signo
y en la multiplicación de sentidos y significados
el silencio y el vacío quedaron en suspenso.

Mañana es para mí este día -pensé-.
Caminaré descalzo y desnudo,
descarnado, sin huesos y sin médula,
pura consciencia en un saco de aire roto,
volátil y efímera como luz de la estrella
que se apaga y se pierde en el abismo del cosmos.

Publicado: Sab, 17 Nov 2012 6:10
por Blanca N. García González
“Estoy en ti” -dijo la voz-.
“Soy el espejo en ti en que se observa el mundo.
En el fuego de tu nombre arde la vanidad
y en la nada al final la verdad germina.”


Sin duda que el mundo es dolor, quizás deberíamos observarlo desde otro punto de vista...de cualquier modo, solo vamos de paso en este mundo de prisa.

Le dejo un cordial saludo, un placer leerle.

re: EN LA VÍA DEL TAROT

Publicado: Sab, 17 Nov 2012 9:16
por Pilar Morte
Me gusta Alejandro J. aunque no comparto alguna de sus terapias, tengo varios de sus libros y algunos me dejan perpleja.
Tu poema es para leerlo despacio y empaparse del sentido que le das a la vida, a la que haces amor-dolor. Volveré.
Abrazos
Pilar

Publicado: Sab, 17 Nov 2012 17:51
por Guillermo Cumar.
Existencialista poema que dice a voz en grito
que hay que organizar la vida y vivirla paso a paso

Un placer leerte, amigo

Un abrazo

re: EN LA VÍA DEL TAROT

Publicado: Sab, 17 Nov 2012 18:26
por Quinteño de Greda
Poema profundo donde los halla...
Cuando los americanos subieron al espacio, y tras gastarse una millonada en tecnologías, se dieron cuenta que los bolígrafos que llevaba la tripulación, no servían de nada, pues no contaron con la ley de la gravedad, y la tinta se les iba hacia arriba...
Llegaron los rusos, y usaron la lógica y la sencillez: se llevaron lápices...

Te dejo una cuarte mía a modo de reflexión:

Herida que no se cierra,
es aquella que se enquista,
es su pus la que te entierra,
el odio...primera pista.

Un fuerte abrazo de uno que te admira.

Publicado: Lun, 19 Nov 2012 8:37
por Juan Marcos
Blanca N. García González escribió:“Estoy en ti” -dijo la voz-.
“Soy el espejo en ti en que se observa el mundo.
En el fuego de tu nombre arde la vanidad
y en la nada al final la verdad germina.”


Sin duda que el mundo es dolor, quizás deberíamos observarlo desde otro punto de vista...de cualquier modo, solo vamos de paso en este mundo de prisa.

Le dejo un cordial saludo, un placer leerle.
El principio y el fin del paréntesis de la eternidad que constituye nuestra existencia, estimada Blanca N. García González, signados están por el dolor. El llanto que acompaña nuestro alumbramiento cuando somos expulsados del vientre nutricio de la matriz, es el primer gesto de nuestra humana experiencia: dolor sufrimos y dolor causamos. La herida profunda que nos acompaña hasta el último momento de nuestra existencia, ésta que llamamos vida, no es sino una prolongada agonía sin reposo que aprendemos a sobrellevar cada día con menos éxito y que al paso de los años acumula dolores, malestares, incomodidades físicas, mentales y espirituales, que en muchas ocasiones nos llevan al callejón sin salida de anhelar que, por fin, la muerte termine de matarnos. Nos abrumamos de tal manera, de tal manera nos llenamos de cosas con sentido aparente, sin más objeto que negar lo evidente: la intrascendencia del ser.

Gozamos, es cierto. Pero es este placer que nos procuramos, este inalcanzable estado de bienestar el que nos lleva a acumular y acumular cosas, emociones, relaciones, sentimientos que a la larga terminan por incrementar las cargas y causas del dolor... quienes tienen la suerte de encontrar el amor, la plenitud intensa de una afinidad afectiva, y además maduros están para vivenciarla más allá de las vicisitudes de los egos y las vanidades... pueden encontrar en ella, quizá, lo único que puede compensar las penalidades de la existencia... la gran mayoría apenas si lo hemos vislumbrado en alguna relación, en el contacto efímero de la pasión y la entrega incondicional en los que nos vemos en nuestra desvalida, frágil e imperfecta condición humana, siendo espejo y reflejo a la vez de la imagen de eternidad, de permanencia, de trascendencia en que, emocionados hasta las lágrimas, enternecidos hasta la médula de los huesos, engendramos nuestra propia progenie... para no hacer otra cosa que eternizar la muerte, el sufrimiento y el dolor... Creamos, inventamos, nos lanzamos a la aventura de conocer y comprender las causas y las cosas que constituyen la realidad del cosmos, creyendo ingenuamente que con ello matamos a la muerte, conquistamos la intrascendencia o podemos llegar a ejercer algún control sobre la realidad... Y luego nos damos palmaditas unos a otros, nos otorgamos gloria y reconocimientos para acariciar los egos de la vanidad y nos paramos en el trono del vacío como dioses omnipotentes e inmortales... no hay nada más patético en el universo que esto... Y lo hacemos sin descanso, en un círculo vicioso que conforma y refuerza un sistema de alienación conductual al que llamamos "normalidad"... pero un día abrimos los ojos a la verdad llana y simple y nos asombramos al descubrir que el "rey" está desnudo, que siempre estuvo desnudo... y que la realidad es un desierto en el que la fantasmagoría de una ilusión nos mantuvo uncidos al yugo de la inercia existencial en pos de una zanahoria inalcanzable, por el sólo hecho de estar diseñado para hacer girar el molino de la historia...

En fin, estimada Blanca N. García González, como sea que sea... saberlo de alguna forma nos libera, de alguna forma nos otorga, al menos, el consuelo de no vivir muriendo en el engaño...

Con afecto te abrazo...

Juan Marcos

Publicado: Lun, 19 Nov 2012 22:02
por Josefa A. Sánchez
Hay en estos versos profundidad y un existencialismo no exento de una visión pesimista de la vida. Me ha gustado leerlo a pesar de sus planteamientos tan alejados de los míos.
Un abrazo.
Pepa

Publicado: Mié, 21 Nov 2012 6:28
por Rafel Calle
Hermoso trabajo, amigo Juan, donde desarrollas una interesante visión del circuito exitencialista.
Ha sido un placer leerte. Felicidades, compañero.
Un cordial abrazo.

Re: re: EN LA VÍA DEL TAROT

Publicado: Mié, 28 Nov 2012 11:02
por Juan Marcos
Pilar Morte escribió:Me gusta Alejandro J. aunque no comparto alguna de sus terapias, tengo varios de sus libros y algunos me dejan perpleja.
Tu poema es para leerlo despacio y empaparse del sentido que le das a la vida, a la que haces amor-dolor. Volveré.
Abrazos
Pilar
Alejandro Jodorowsky, como Carlos Gustavo Jung, y muchos otros sabios de antaño y de ahora, tiene el encanto de cuestionar las certezas de un universo objetivo signado por leyes de una racionalidad causal absoluta, como la poesía, la música, y el arte en general... entrar a ese universo complejo donde caos y necesidad crean la danza de la realidad y las certezas absolutas se esfuman como quimeras y fantasmas de un racionalismo exacerbado y grotesco, mientras la nada, el vacío, la intrascendencia del ser van tomando forma en la consciencia y nos permiten despojarnos de las vestiduras de la vanidad y ser libres en lo más íntimo de la existencia individual y colectiva, aun en la consecución de las otras formas de la libertad, como pueden ser la justicia social y el bienestar material... es un viaje que, desde luego, es causa de mucha perplejidad... porque las generaciones que hemos sido formados en el racionalismo de la ilustración hemos sido inoculados por la duda metódica que, si por un lado nos previene contra los oscurantismos del fanatismo, por el otro nos incapacita para aceptar con naturalidad fenómenos que trascienden el orden de lo sensible y nos instalan en el territorio de lo suprasensible... expresado en la carta de El Loco de las arcanos mayores del Tarot... sin embargo, como es evidente, en la dialexis conceptual de este diálogo, las reservas o, para decirlo en forma franca y directa, los traumas existenciales que signan y dan sentido a la existencia de mi ser, conforman una fuerza reactiva arraigada y profunda... la lucha entre el arcángel Miguel y Luzbel lejos está aun de arrojar un vencedor... quizá sea también pura ilusión y vanidad el que tenga que haberlo... hay quien dice que es el viaje y no el destino lo que proporciona el sentido medular de la experiencia humana...

Te abrazo con afecto y con gusto espero tu retorno... claro está...

Juan Marcos

Publicado: Mié, 05 Dic 2012 2:06
por Juan Marcos
Guillermo Cuesta escribió:Existencialista poema que dice a voz en grito
que hay que organizar la vida y vivirla paso a paso

Un placer leerte, amigo

Un abrazo
La rebeldía revela. De algún modo descubre el velo que en la quietud, en la tranquilidad, en la paz de la superficie del lago que refleja como espejo la luz del infinito y sus formas, oculta el tenebroso abismo de la profundidad donde el ego y la vanidad ahogan al sí mismo del sí mismo del ser, lo aniquilan, para entregarlo autómata en las fauces de la mediocridad y la inercia existencial. Primero es la ruptura, la tormenta, el desbordamiento, la revolución esencial... puede entonces ya comerse el fruto amargo de la verdad, que en el dulcísimo fondo de la comunión universal engendran la beatitud, esa paz de infinita felicidad que puede encontrarse en el servicio a la humanidad...

Es la vida misma, en su desbordante radicalidad, la que se organiza y nos organiza, un paso a la vez, a veces muchos más...

Es igual un placer saberte en mis reflexiones existenciales, amigo Guillermo Cuesta...

Te abrazo con afecto...

Juan Marcos

Re: re: EN LA VÍA DEL TAROT

Publicado: Jue, 06 Dic 2012 7:05
por Juan Marcos
Quinteño de Greda escribió:Poema profundo donde los halla...
Cuando los americanos subieron al espacio, y tras gastarse una millonada en tecnologías, se dieron cuenta que los bolígrafos que llevaba la tripulación, no servían de nada, pues no contaron con la ley de la gravedad, y la tinta se les iba hacia arriba...
Llegaron los rusos, y usaron la lógica y la sencillez: se llevaron lápices...

Te dejo una cuarte mía a modo de reflexión:

Herida que no se cierra,
es aquella que se enquista,
es su pus la que te entierra,
el odio...primera pista.

Un fuerte abrazo de uno que te admira.
Mucha razón hay en tu reflexión, estimado Quinteño de Greda: la misericordia es mayor que la justicia...

Un placer saberte siempre en mis reflexiones existenciales...

Con afecto te abrazo...

Juan Marcos

Publicado: Mar, 08 Ene 2013 17:55
por Rafel Calle
Hermoso trabajo de Juan, que pertenece a una serie de poemas muy recomendables.
Abrazos.

Re: EN LA VÍA DEL TAROT

Publicado: Dom, 13 Ene 2013 7:32
por Hallie Hernández Alfaro
Juan Marcos escribió:[RIGHT]Un arte que no sirve para sanar no es arte.

Alejandro Jodorowsky[/RIGHT]

“Deshazte de lo que te incomoda, -dijo la voz-.
La verdad está en el equilibrio de la armonía,
y la armonía consiste en desechar lo superfluo
hasta llegar al núcleo de la existencia que es la muerte del ego.
Iluminación y vida serán uno en la eternidad del instante.”

Tres de cuatro en similar detalle,
la distinción se encuentra en uno
-aquél que no es principio ni es final-.
Dos de tres en la igualdad,
la distinción se encuentra en uno
-aquél que no es principio ni es final-.
En esto consiste la ley de la distinción en la igualdad,
camino de descenso y purificación.

Te llamé, te invoqué en el desamparo
y fue el silencio tu voz.
Pronto a la vista se presentó la imagen sedienta de sentido,
en tus manos florecieron jardines
y el amor ofreció el fruto amargo de la eternidad.

Un desfile de errantes,
en grotescos vestidos de fausto y ostentación,
buscando el sitial más elevado en un árbol carente de raíces y simiente:
laberinto de signos de Minotauro hambriento,
sin hebras proverbiales, ni Ariadnas, ni Teseos.

“Estoy en ti”, -dijo la voz-.
“Soy el espejo en ti en que se observa el mundo.
En el fuego de tu nombre arde la vanidad
y en la nada al final la verdad germina.”

Basta ya -grité-, me hiere la sombra de tu verbo.
Mientes en la verdad, maldito,
y pretendes perderme en la razón con la seducción de la elocuencia.

Los ardientes tizones de sus ojos incineraron el núcleo de mi ser
y, fulminante, ordenó la dispersión de las cenizas.
Guardé en silencio el instante de la muerte.

“Conocer la verdad no te aleja del camino del error, -dijo la voz-.
Miles son los pasos perdidos en la noche:
sin el brillo que nace de la esencia,
a merced están de los fuegos fatuos que acechan
a la vera de la locura y de la confusión.
Debes morir en una pieza,
dispersar las cenizas para que nada quede,
y renacer en mí
para que espejo y mundo sean en ti tu ser mismo.”

Pero el mundo es dolor -repliqué-,
y es dolor lo que unifica mi ser con el núcleo de la existencia,
el amor sólo ha sido un eco remoto y difuso,
la sombra sin forma en el altar de la memoria.
Y sin amor la muerte que nos mata carece de sentido.

“Vanidad de vanidades es el ser humano.
Vanidad de vanidades hasta la médula de los huesos, -dijo la voz-.
Siendo instruido se cree sabio,
mas desecha la ciencia de la sensatez.
Recuerda ahora y entiende:
¿No convertí en tinieblas el sol de tu razón?
De una vez entiende y ciñe tu espalda con la carga de la sabiduría,
porque la sabiduría es corona de luz para el entendimiento
y carga sin peso que da honra a la espalda que ciñe.
La gloria del mundo es la sombra de la realidad,
¿para qué buscar la sombra cuando tienes el cuerpo?
Ni el dolor ni el amor conforman la realidad del mundo:
fuegos son apagados cuyos rescoldos carecen de calor,
muertos errantes que abruman la memoria de los vivos,
torbellinos frenéticos del oscuro anhelo de la permanencia
que incineran su ser en hogueras de vanidad
para dejarlos postrados y vacíos.”

¿Y el grito de reclamo? ¿Y la justicia? -Exclamé-.
¿Es el mundo prisión y condena?
¿Cadalso al que sumisos avanzamos en el secreto de las complicidades
del vacío y la intrascendencia?
¡No! -Grité-. ¡Me niego a aceptarlo!
Sólo amor y dolor nos ofrecen la vida que nos niegan.
Sólo amor y dolor dan forma a la realidad del ser,
a la humanidad que somos,
aun en la insignificancia y en la intrascendencia.
Amo este instante de apariencia
en que soy con el mundo uno y todo,
aun cuando ni siquiera quede de mi rostro el cristalino destello de una lágrima.

Nada dijo la voz. Calló el signo
y en la multiplicación de sentidos y significados
el silencio y el vacío quedaron en suspenso.

Mañana es para mí este día -pensé-.
Caminaré descalzo y desnudo,
descarnado, sin huesos y sin médula,
pura consciencia en un saco de aire roto,
volátil y efímera como luz de la estrella
que se apaga y se pierde en el abismo del cosmos.






Sube este excelente trabajo para deleite de todos.