Editorial Alaire

Es desgarrador el relato que nos presentas, Ronald. Ya sabemos todo lo que se pierde en esas adicciones que descontrolan al ser humano, y desgraciadamente no sólo puede lamentarse lo que pudo haber sido, sino que se echa por la borda lo que se tiene y deja de verse. Difícil y complejo tu poema, pero muy bien resuelto, con valores que, una vez se perciben, persisten verdaderamente.

Enhorabuena, Ronald. Un abrazo.

Has repetido el poema , seguramente te has despistado
Un abrazo
Pilar

Hermoso poema, amigo Ronald, en el que aprecio un gran vocación de innovar en el lenguaje, todo salpicado de metáforas que quieren eslabonar el resultado alegórico de la composición. El delirante transitar de la mano de los fastos espirituos del alma.
Ha sido un placer leerte. Felicidades.
Un cordia abrazo.