Editorial Alaire

ODA AL HOGAR
Mientras estas cucharas nos reúnan,
mientras estos tenedores se prolonguen
y sea cóncavo el hogar que nos respalda.
Mientras este techo sirva de respaldo,
mientras estos sofás cierren nuestros miedos
y estos terrores sigan empotrados.
Mientras este suelo cómodo nos guarde
a nosotros, sólidos, carne de horca,
mientras estos tenedores sean el piso
de la larga integridad hecha raciones
y los brazos de este hogar nos den su lumbre,
será cómodo que el centro nos atraiga
y la gravedad nos cubra con su manto.

Sube de la Sala de Espera.

JORGE SÁNCHEZ escribió:ODA AL HOGAR
Mientras estas cucharas nos reúnan,
mientras estos tenedores se prolonguen
y sea cóncavo el hogar que nos respalda.
Mientras este techo sirva de respaldo,
mientras estos sofás cierren nuestros miedos
y estos terrones sigan empotrados.
Mientras este suelo cómodo nos guarde
a nosotros, sólidos, carne de horca,
mientras estos tenedores sean el piso
de la larga integridad hecha raciones
y los brazos de este hogar nos den su lumbre,
será cómodo que el centro nos atraiga
y la gravedad nos cubra con su manto.

Creo que es el primer poema que tengo el gusto de leerte con detenimiento y me ha sorprendido; primero, por el tema; y luego, por la manera de tratarlo. En cuanto al tema, bajo el epígrafe de hogar, reúnes un conjunto de aspectos que nos señalan como seres gregarios, necesitados de compañía y protección. El hogar puede ser la familia, puede ser la sociedad, pueden ser los amigos y las costumbres. Lo que buscamos en el hogar es la seguridad y el alimento, recursos básicos para la supervivencia ligados a la reproducción, como imperativo de la especie. El tratamiento, a través de versos largos, ennumerativos, y oraciones adverbiales, producen el efecto deseado de sensación de apego, de dependencia, de inexorable necesidad. Tal vez pudieran pulirse algunos aspopectos, pero creo que el poema consigue su finalidad.
Salud.