Editorial Alaire

jose junco escribió:CONSEJOS

Si en un empeño loco de luces apagadas y espejos que se dejan, te encuentras con el cuerpo que no te da señales, parece como ajeno, comprado en las rebajas y encima va y te duele.

Si notas que los ojos se cansan y no tienen ni afán ni perspectiva, sino un telaraña propensa al lagrimeo y un reguero de estrellas que vienen y se marchan igual que una paloma que ha sido diluida.

Si ves que en las dos manos te crecen los volcanes y dejan una huella antigua de explosiones y puedes por la noche saber de geología y cosas del relieve que nunca te aprendiste.

Si de pronto tropieza la cara con el pecho y forman amalgama de sombras confundidas y miras hacia abajo sin querer y no hallas el modo apetecido de volver a tu altura.

Si una mañana partes dispuesta a una proeza y sientas que las piernas se quedan en la cama, cobardes y sin fuerza, y quieres pero luego te sientas y meditas y tornas despacito lo poco que has andado.

En fin, sin dramatismos, ni género de dudas, empieza a hacer un pacto de no agresión y cede la parte que te toque. La cosa está en ponerse un poco de puntillas y hacer que el tiempo tenga piedad con los derrumbes, y quiera dejar vivos el pálpito y la sangre.

Un pacto no muy digno, en fin, pero posible