Noviembre
Publicado: Dom, 29 Jul 2012 19:34
Eran fronda tus ojos, eran poma
tus manos. El jacinto estremecido
entre rubor de muérdago rendido,
quiso anidar en ti como paloma.
Y entonces en la guerra de la broma,
en esa senectud de lo pedido,
no fue tu voz relámpago escondido,
sino cerúlea estampa, punto y coma.
Hoy eres el molino arremangado,
la fuente de la escarcha y de la grima,
en incontable otoño adelantado.
Al techo del basalto rindes rima
y si es verdad que el fuego está truncado,
el corazón es calca entre una sima.
Alberto Madariaga
(2010)
tus manos. El jacinto estremecido
entre rubor de muérdago rendido,
quiso anidar en ti como paloma.
Y entonces en la guerra de la broma,
en esa senectud de lo pedido,
no fue tu voz relámpago escondido,
sino cerúlea estampa, punto y coma.
Hoy eres el molino arremangado,
la fuente de la escarcha y de la grima,
en incontable otoño adelantado.
Al techo del basalto rindes rima
y si es verdad que el fuego está truncado,
el corazón es calca entre una sima.
Alberto Madariaga
(2010)