Editorial Alaire

A veces, la noche me sorprende
y me escupe a la cara un sueño roto,
o simplemente me abandona
tirado en una esquina,
jirón de lo que fui,
escama absurda en la ciudad achicharrada.
Me entona cánticos antiguos
vestidos de esperanza,
pero sé que los muros
parpadean sus guiños de cemento
al darles la espalda.
Entonces quiero hundirme,
alterar el orden de las cosas
y respirar el aire de la tierra,
pisar las nubes grises,
sentir la libertad de la materia densa.
No es posible
vivir la aureola triste de las sombras
para estrechar la mano huidiza
de una felicidad que ocupa carros
de palabras, sentimientos
embutidos en piel de poesía
sin cauce. Cabizbajo,
presa mi mente en los estratos,
busco una vez
y otra en tus desiertos
canales líquidos que corran
hacia puntos de luz,
alamedas ruidosas enmarcadas
en la frágil rutina
de la felicidad.

Sí es que frágil la rutina de la felicidad y extrañamente poco valorada cuando se tiene, con lo difícil que es conseguirla. Y tú lo dices muy bien en tu hermoso trabajo, amigo Roberto.
Ha sido un placer leerte. Felicidades por el poema.
Un cordial abrazo.

La felicidad a veces es un instante perdida en el siguiente y retenerla sin su consentimiento es enormemente dificil. Quizás exigimos a la vida más que lo que puede darnos. No sé.
Un poema dicente y hermoso. Un placer pasar por él
Abrazos
Pilar

Todo el poema es conmovedor pero el comienzo te atrapa sin que puedas dejar de leer...

Muy bonito trabajo a pesar de la tristeza y el abandono que reflejas.

Abrazos.

Rafel Calle escribió:Sí es que frágil la rutina de la felicidad y extrañamente poco valorada cuando se tiene, con lo difícil que es conseguirla. Y tú lo dices muy bien en tu hermoso trabajo, amigo Roberto.
Ha sido un placer leerte. Felicidadesa por el poema.
Un cordial abrazo.

Nada hay seguro, todo pasa, la ventisca de la vacilación puede arrastrarlo todo... Gracias, Rafel.

Pilar Morte escribió:La felicidad a veces es un instante perdida en el siguiente y retenerla sin su consentimiento es enormemente dificil. Quizás exigimos a la vida más que lo que puede darnos. No sé.
Un poema dicente y hermoso. Un placer pasar por él
Abrazos
Pilar

Tus palabras son sensatas y verdaderas. Agradezco tu comentario y tu valoración. Besos.

Ansiando la felicidad se te fue al sueño y allí hace camino hacia el poema
huyendo del sopor y del cemento.

Gran poema. un abrazo

Guillermo

Maria Pilar Gonzalo escribió:Todo el poema es conmovedor pero el comienzo te atrapa sin que puedas dejar de leer...

Muy bonito trabajo a pesar de la tristeza y el abandono que reflejas.

Abrazos.

Tristeza y abandono, siempre inspiradores... Saludos, Pilar

Guillermo Cuesta escribió:Ansiando la felicidad se te fue al sueño y allí hace camino hacia el poema
huyendo del sopor y del cemento.

Gran poema. un abrazo

Guillermo

Agradecido siempre, Guillermo. Saludos.

Arriba con este hermoso poema de Roberto.

Rafel Calle escribió:Arriba con este hermoso poema de Roberto.

Gracias, Rafel, por recuperar este poema del arcón del olvido. Abrazos.

Gracias, por subirlo, porque, como muchos otros enormes poemas que duermen en el foro, este también me lo había perdido. Un placer venir.
Un abrazo.
Pepa

Josefa A. Sánchez escribió:Gracias, por subirlo, porque, como muchos otros enormes poemas que duermen en el foro, este también me lo había perdido. Un placer venir.
Un abrazo.
Pepa

Gracias, Pepa. Me gusta que lo disfrutes. Besos.

Un poema muy hermoso, Roberto, en su melancolía, en esa fragilidad de los deseos,
me ha gustado mucho,un estilo más liviano que el que estoy acostumbrado leer de ti, pero sin embargo profundo. Feliz domingo, felicitaciones.

me ha gustado mucho tu poema. puedo sentir el lugar en que la poesía hace el esfuerzo de ser y es confuso y complejo. algo contado de adelante hacia atrás, mirándose.
saludos