Editorial Alaire

Mi campo de visión:
las mesas rojas,
las sillas,
las servilletas de papel,
un plato de aceitunas.
Alrededor,
dolor,
ausencia,
un vacío irredento.
Va a ser harto difícil
llenar el charco
que dejó el espejismo.

Esos charcos suelen llenarse a base de lagrimas, pero mejor bailar la danza de la lluvia de besos que ayuda a borrar los espejismos. Un gusto entrar en tu terraza.
Un abrazo.
Pepa

Ausencias en versos cortos pero hermosos
Abrazos
Pilar

ROBERTO LÓPEZ escribió: Mi campo de visión:
las mesas rojas,
las sillas,
las servilletas de papel,
un plato de aceitunas.
Alrededor,
dolor,
ausencia,
un vacío irredento.
Va a ser harto difícil
llenar el charco
que dejó el espejismo.

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He venido a buscar esta segunda ausencia que sigue ahogada en espejismos y charcos.
Tus poemas breves están llenos de imágenes.
Beso.

No pienses que es tan difícil salir del espejismo, pues entonces se te incrusta
y ya no puedes ni vaciarlo ni llenarlo.

un abrazo

Guillermo

Josefa A. Sánchez escribió:Esos charcos suelen llenarse a base de lagrimas, pero mejor bailar la danza de la lluvia de besos que ayuda a borrar los espejismos. Un gusto entrar en tu terraza.
Un abrazo.
Pepa

No puedo estar más de acuerdo, Pepa. Un abrazo.

Estoy leyendo tus Ausencias en cuenta atrás y no me están decepcionando.

Me ha gustado mucho tu poema.

Abrazos.

Pilar Morte escribió:Ausencias en versos cortos pero hermosos
Abrazos
Pilar

Encantado de que los disfrutes, Pilar. Abrazos.

[quote="Marisa Peral---

He venido a buscar esta segunda ausencia que sigue ahogada en espejismos y charcos.
Tus poemas breves están llenos de imágenes.
Beso.[/quote]

Gracias por tu paseo literario, Marisa. Besos.

Un poema corto pero de exagerada contundencia. Esa mesa desolada, que imagino de manteles arrugados y manchados de restos de vino; botellas vacías, alguna colilla esmagada en un plato, etc,,, me parecen la viva imagen de la desolación.

Biquiños, querida amiga.

Guillermo Cuesta escribió:No pienses que es tan difícil salir del espejismo, pues entonces se te incrusta
y ya no puedes ni vaciarlo ni llenarlo.

un abrazo

Guillermo

El problema es cómo llenar ese vacío que deja el espejismo al disolverse. Y, sobre todo, la dolorosa sensación de que el espejismo era real y posible y que torpes incrustamientos se metían entre los radios de las ruedas y le imposibilitaban rodar. En cualquier caso, hice todo lo que pude y no me dejaron. Saludos, Guillermo.

Maria Pilar Gonzalo escribió:Estoy leyendo tus Ausencias en cuenta atrás y no me están decepcionando.

Me ha gustado mucho tu poema.

Abrazos.

Eres muy generosa conmigo, Pilar. Saludos.

J. J. M. Ferreiro escribió:Un poema corto pero de exagerada contundencia. Esa mesa desolada, que imagino de manteles arrugados y manchados de restos de vino; botellas vacías, alguna colilla esmagada en un plato, etc,,, me parecen la viva imagen de la desolación.

Biquiños, querida amiga.

Así es, amigo, la ausencia es desolada y desoladora al mismo tiempo, arrasa. Agradezco tus palabras.