Editorial Alaire

La toalla de playa.
El agua para el perro
y un cuenco.
La nevera portátil,
la cerveza.
Ella pasea desnuda,
se exhibe, muestra
sus bellezas ocultas.
Piensa, piensa.
Que no se olvide nada.
Pipas con sal,
el bañador, las chanclas.
Tengo el bikini sucio.
Voy a tener
que usar este otro negro.
Sus pechos se anticipan,
cruzan el cuarto
siguiendo los designios
de sus pezones.
Yo hago tiempo
tendido en su cama.
Hazme una copia
de tus llaves.
Se depila los labios
en cuclillas.
No es apropiado
mostrar un pubis imperfecto.
Aparento dormir,
pero mi mente rima
con mi agitado deseo.
El short de rayas marca
una vulva abultada.
No. Me queda
demasiado pequeño.
¿Qué sombrero me pongo?
Vuelven sus nalgas blancas
a surcar el espacio
entre mis ojos y el deseo.
Ya estoy. Voy a
tirar la bolsa de basura.

El estilo figurativo va dejando paso a una cada vez mayor presencia del erotismo, para llegar a ese final irónico que deja tan buen sabor de boca. Un poema que me ha gustado, me ha parecido a ratos casi cinematográfico.

Un abrazo.

El poema es espectacular. Aunque la toalla acabe junto a la bolsa de basura. Y el que no lo sepa apreciar, no entiende. Como la vida misma...

Juan Fionello escribió:El estilo figurativo va dejando paso a una cada vez mayor presencia del erotismo, para llegar a ese final irónico que deja tan buen sabor de boca. Un poema que me ha gustado, me ha parecido a ratos casi cinematográfico.

Un abrazo.

¿Puede la vida ser el poema, o el poema la vida? Rotundamente, sí. Cuando extendemos el sentimiento como una alfombra vital, todo respira lirismo, hasta los actos más atroces o vulgares pueden ser pergeñados con la saliva poética. Creo incluso que puede llegarse al punto en que la licencia que nos permitimos pudiera transgredir el puro estado de la naturaleza y exprimirse en el decantador de lo grosero. Así lo pienso y lo veo. Por lo menos ahora. Saludos, amigo Juan.

Estela Aguilar escribió:El poema es espectacular. Aunque la toalla acabe junto a la bolsa de basura. Y el que no lo sepa apreciar, no entiende. Como la vida misma...

Amiga Estela, no siempre el alfa y el omega se tocan. No es el caso de que la toalla acabe en la bolsa de basura, no, no es eso. Permíteme decirte que la bolsa de basura sólo es un contrapunto, una sombra necesaria que realza la luz de la toalla y de la gloriosa aparición del desnudo, como en los cuadros del Caravaggio. Entiendo perfectamente tu apreciación, pero la toalla se salva y comparte con los demas elementos salvíficos del poema un final celeste. Agradezco tu comentario. Besos.

Un poema descriptivo muy atractivo y que se lee con interés
Abrazos
Pilar

Pilar Morte escribió:Un poema descriptivo muy atractivo y que se lee con interés
Abrazos
Pilar

r
Celebro que te guste, Pilar. Besos.

Sensualidad al borde del agua y un poema que va a rápido nado
a captár el maridaje entre arena, agua y las ávidas miradas.
Un abrazo

Guillermo

Guillermo Cuesta escribió:Sensualidad al borde del agua y un poema que va a rápido nado
a captár el maridaje entre arena, agua y las ávidas miradas.
Un abrazo

Guillermo

Has captado perfectamente el vínculo entre los elementos que se conjugan en el poema, Guillermo. Abrazos.

Sensual y tierno este poema que presagia calores de verano, aguas agitadas y arenas candentes, aunque a veces en el paisaje ideal se cruce la impertinencia de una bolsa de basura. Un placer venir.
Un abrazo.
Pepa

Josefa A. Sánchez escribió:Sensual y tierno este poema que presagia calores de verano, aguas agitadas y arenas candentes, aunque a veces en el paisaje ideal se cruce la impertinencia de una bolsa de basura. Un placer venir.
Un abrazo.
Pepa

Agradezco tu afecto, Pepa. Besos.