YO, URDANGARÍN
Publicado: Dom, 29 Abr 2012 10:54
Por más que me acuséis la ley me ampara,
así que basta ya de dar la vara;
se palpa una tensión en el ambiente
que no presagia nada positivo,
mi suegro se ha enfadado sin motivo
y quiere que me muera o que me ausente.
Menuda me la habéis montado, macho,
está que se me come el populacho
por unas facturillas que, en esencia,
son sólo una minucia y cuatro perras
para lo que es común por estas tierras
en las que compartimos residencia.
Llamarle a saquear el patrio templo
conducta no aceptada como ejemplo,
es algo tan cruel como indignante.
La carga de mis hijos y mi esposa
me obligan a arriesgarme a cualquier cosa
en aras de sacarles adelante.
Lo siento, yo es que vi la puerta abierta
y dije a mi conciencia: -“Ya estás muerta.”
Mas tengan los presentes bien seguro
que el ánimo de lucro no ha existido;
robando, hasta la fecha, siempre he sido
un hombre inmaculado, limpio y puro.
Lo cierto es que de mí ya no se fía
¡demonios! ni el canario de Sofía.
El príncipe valiente no perdona
-está absolutamente furibundo-
la imagen de Zarzuela en todo el mundo
y el golpe que he asestado a su corona.
Joder Marichalar, cómo te envidio,
tan pancho y ya cobrando tu subsidio
después de suspender la convivencia.
¿Qué ha sido de tu estatua del museo?
la mía, tan guapote, según creo
la van a usar de falla de Valencia…
así que basta ya de dar la vara;
se palpa una tensión en el ambiente
que no presagia nada positivo,
mi suegro se ha enfadado sin motivo
y quiere que me muera o que me ausente.
Menuda me la habéis montado, macho,
está que se me come el populacho
por unas facturillas que, en esencia,
son sólo una minucia y cuatro perras
para lo que es común por estas tierras
en las que compartimos residencia.
Llamarle a saquear el patrio templo
conducta no aceptada como ejemplo,
es algo tan cruel como indignante.
La carga de mis hijos y mi esposa
me obligan a arriesgarme a cualquier cosa
en aras de sacarles adelante.
Lo siento, yo es que vi la puerta abierta
y dije a mi conciencia: -“Ya estás muerta.”
Mas tengan los presentes bien seguro
que el ánimo de lucro no ha existido;
robando, hasta la fecha, siempre he sido
un hombre inmaculado, limpio y puro.
Lo cierto es que de mí ya no se fía
¡demonios! ni el canario de Sofía.
El príncipe valiente no perdona
-está absolutamente furibundo-
la imagen de Zarzuela en todo el mundo
y el golpe que he asestado a su corona.
Joder Marichalar, cómo te envidio,
tan pancho y ya cobrando tu subsidio
después de suspender la convivencia.
¿Qué ha sido de tu estatua del museo?
la mía, tan guapote, según creo
la van a usar de falla de Valencia…