NUBES
Publicado: Dom, 15 Abr 2012 10:54
NUBES
Las ovejas del cielo lana negra cuando el perro solar las deja heridas antes de dispersarse hacia muy alto henchidas de dolor se precipitan. Es como si una ley nunca estudiada cuajara entre sus ojos asombrados cristalizando en ese llanto fértil que aquí tanto se añora cuando el frío.
Pastan de luz en luz o se disuelven cansadas de bregar en los azules silencios de los prados celestiales. Algunas, más osadas, van y muerden el aire con sabor de hierbabuena. Pero hete aquí que al fin se desmoronan y quedan remontando la metralla que llega a los pulmones y congela sangres y corazón.
Es cierto que en su afán de mariposas adoptan modos, formas, hijos mancos y van por esas tierras siderales a cúspides y valles invisibles allá por los terrenos del olvido. Yo las comparo con tu cuerpo ausente cuando cansado de buscar su horma de lanza a navegar corriente abajo, se para en algún bucle de cristales y luego hierve hasta quedar rendido.
Las ovejas del cielo lana negra cuando el perro solar las deja heridas antes de dispersarse hacia muy alto henchidas de dolor se precipitan. Es como si una ley nunca estudiada cuajara entre sus ojos asombrados cristalizando en ese llanto fértil que aquí tanto se añora cuando el frío.
Pastan de luz en luz o se disuelven cansadas de bregar en los azules silencios de los prados celestiales. Algunas, más osadas, van y muerden el aire con sabor de hierbabuena. Pero hete aquí que al fin se desmoronan y quedan remontando la metralla que llega a los pulmones y congela sangres y corazón.
Es cierto que en su afán de mariposas adoptan modos, formas, hijos mancos y van por esas tierras siderales a cúspides y valles invisibles allá por los terrenos del olvido. Yo las comparo con tu cuerpo ausente cuando cansado de buscar su horma de lanza a navegar corriente abajo, se para en algún bucle de cristales y luego hierve hasta quedar rendido.